Todos, alguna vez, soñamos con ser un ¡Héroe!

Todos tenemos recuerdos hermosos de nuestra infancia. Memorias, que, aún en la vejez estarán junto a nosotros (No soy tan viejo, pero llevo ya buen tiempo con algunas de estas).

El hecho de que muchas memorias se preserven por tanto tiempo en nuestras mentes y corazones, creo, tiene un toque mágico y extraordinario que todos deberíamos de considerar y escudriñar.

En mi caso, una de esas memorias es: La primer vez que ví la película de Hércules de Disney.... Aaaaaah!!! Que genial... Sinceramente, no sé como explicar la felicidad interior que me genera solo pensarlo, recordarlo, imaginarlo y en este momento escribirlo y relatarlo .

Cuando era niño simplemente reaccionaba o sentía las emociones que me provocaba. Me maravillaba ver a ese Hércules que quería ser grande, reconocido, querido, amado, pero, irónicamente lograba solo todo lo contrario, me veía profundamente identificado (¿Vos no?). Muchas cosas me maravillaban... y bueno, que decir del inigualable sentido del humor de los personajes que forman parte de la historia como Hades: - «¡Eyyy! ¿Quién apagó la vela?» jajaja

Años después, volví a verla movido por esas memorias gratas de mi infancia, pero, ya con un camino de vida recorrido... Que maravillosa experiencia... Sin duda persistía en mi esa búsqueda de reconocimiento. A diferencia de aquellos años ahora encontré los intentos fracasados de lograrlo, el dolor que causaba esos fracasos, el rechazo. Luego la búsqueda de grandeza que, en el proceso, se distorsiona y se aleja del verdadero propósito, en el caso de "Herc": músculos, reconocimiento, cariño de todos, figuras de acción, hasta una bebida energetica y sandalias... «....¿Quiere?»

Es interesante observar nuestra carrera frenética por ser un "héroe verdadero" o más bien reconocimiento. Búsqueda que a lo mejor se ha distorsionado bajo los criterios de este mundo: fama, lujos, experiencias constantes, divulgación y la espera ansiosa de respuesta de aquel mundo que esperamos impresionar para sentirnos amados, sentir que lo hemos logrado... pero al igual que "Muscules", amigos... la grandeza no reside ahí... como dijo su padre: «el valor de un héroe está en su corazón.»

De niño soñaba con ser un héroe a como infantilmente lo veía Hércules, pero, sin duda alguna el eco de Dios estaba inmerso en esa historia y estaba desde aquel momento hablando a mi corazón.

El momento más precioso de esta historia es cuando Hércules pone en riesgo, sin pensarlo, su vida para rescatar a su amada Meg, cuando todo se veía perdido, la meta auténtica se hace palpable en su vida por el fin más auténtico, el amor.

Hércules hace un trato con Hades, ofrenda su vida a cambio de la de su amada, salta al Río de la Muerte y nada contratiempo para rescatarla, la cosa, si lo recuerdan, es que cada momento en el río estaba quitando su vida... contra todo pronóstico logra llegar a ella y ese acto de amor y sacrificio le vale para recobrar su identidad como un dios... y más que eso: Un Héroe...

Que acto más increíble, cuanta grandeza en él. Olvidar todo a lo que aspirabas por alguien más y que amas de todo corazón. ¡Wouw!... ¡Que varonil, por cierto!

Amigos, he de reconcer que salieron de mí más que una sola lágrima... Quedé maravillado, encantado, agradecido con Dios por hablarme de esta manera tan especial... Impactado pensé y reconocí que él (Dios) es un héroe extraordinario, el cual, ha dejado y dado todo por mí, por tí.

Y no solo eso, sino que yo estoy llamado a hacer cosas similares pues soy imagen y semejanza de él. Me hacia ver que, desde que era pequeño, aquella vez, ya me estaba invitando a seguirle en ese camino, que, no es idéntico al de él, pero, sigue sin dudas sus huellas.

En un mundo cada vez más egoista, son vitales, héroes que hagan la diferencia.

«el valor de un héroe está en su corazón.»

Alguien dirá: - Pero Moisés, esa historia es un mito inventado. Y pues, sí, es verdad, pero, siguiendo la visión de mi querido amigo J.R.R.Tolkien, escritor del Señor de los anillos, los mitos pueden ser medios en donde hablar y comunicar verdades profundas... y bueno, para muestra un botón...

Todos, alguna vez, en algún momento, soñamos, anhelamos ser un héroe...

Solo te invito a detenerte un momento y... recordarlo...