mobile isologo
    search...

    Nunca supiste, amor mío, y ya no importa

    Anthus

    May 16, 2025

    78
    Nunca supiste, amor mío, y ya no importa
    Start writing for free on quaderno

    Otro amanecer se posa con sus dedos lúgubres sobre mi semblante,
    y yo errante (como sombra de lo que una vez fui)
    me despierto sin la certeza de por qué las lágrimas acuden a mi lecho
    como monjas mudas que rezan por lo irremediable.

    No sé si este llanto es hijo de mi alma hendida,
    o de las palabras que exhalas con la displicencia de quien
    no sabe que cada letra puede ser puñal,
    ni que el silencio

    ese que dejas entre frase y frase
    me asfixia más que tu crueldad involuntaria.

    Quizás es el modo en que pronuncias mi nombre,
    tan liviano, tan exento de gravitación,
    como si fuese una brizna que se despega del trigo
    o el último suspiro de una mariposa moribunda.


    ¡Ja! Yo que he amado incluso el sonido de tu respiración,
    me he convencido de que no merezco el peso de tu voz.

    Jamás te dije

    (porque no sabría cómo)
    que cada gesto tuyo era una constelación para mi universo,
    que tus silencios los traducía elocuentes,
    que cuando buscabas a otra, yo me extinguía en secreto
    como una vela que prefiere apagarse
    antes que admitir que la noche ya no la necesita.

    Nunca supiste

    (y ahora ya no importa)
    que me aprendí tu discurso como quien memoriza oraciones
    no por fe, sino por amor al sonido que las sostiene.


    Fui eco, fui muro de lamentos,
    fui consuelo mudo a tu vanidad herida,
    fui ese faro que nunca viste mientras naufragabas
    en brazos que no eran los míos.

    Hoy has dicho que otra te sostuvo,
    que otra mereció el lugar en tu victoria o tu derrota,
    y yo… yo que tejí tus alas con mis dedos temblorosos,
    ahora contemplo cómo vuelas sin llevar en tu plumaje
    ni un solo hilo de lo que te entregué.

    Pero ya es tarde, y mi llanto (ese que no sabes nombrar)
    ha dejado de buscar culpables.
    Lloro como llora el otoño al desnudarse de sus hojas,
    no por lo que perdió, sino por la belleza
    que nadie supo ver mientras aún vestía los árboles.

    Nunca te dije,
    nunca supiste…
    y en esta cobardía,
    te sigo amando,
    como sólo se ama en las historias
    que el viento nunca quiso contar.

    Anthus

    Comments

    There are no comments yet, be the first!

    You must be logged in to comment

    Log in