Amor, dolor, superación.

2022

2023

Son dos años a los que les debo mucho.

Me enseñaron bastante mediante situaciones que nunca creí enfrentar.

Y perdí, me desilusione y descubrí verdades de personas que no me esperé, ni quería dejar ir o creer.

No fueron los mejores años, tampoco me gustaría volver a esos momentos, pero si me dieran la oportunidad de cambiarlos, no lo haría.

Todo el sufrimiento del ayer, son las recompensas del hoy; no sería quién soy hoy, y mucho menos hubiera tenido el crecimiento que tengo en el presente.

Hubiese seguido en un espiral de personas que me hacían creer que las conocía cuando en realidad no lo hacía.

Y hubiese seguido aguantando situaciones por personas que hoy reconozco, y me demostraron, no valían ni el mínimo esfuerzo.

Actualmente no les tengo rencor, mucho menos interés. ¿Lo veo lo triste? Sí, pero no por la pérdida de ellos en mi vida, ni por mí, sino lo que ellos perdieron; una persona que estaba dispuesta a poner sus manos en el fuego por ellos.

Y no creo que dimensionen lo grave que eso fue, y si lo hicieron, espero que en el futuro no se arrepienten por lo que perdieron como usualmente repetidas veces hicieron.

No les deseo el mal, espero que tengan todo en el presente y futuro para no volver por lo que se lamentan haber perdido y aprecien su valor cuándo ya no lo tienen o nadie los entiende como únicamente yo solía hacerlo.

Mucho tiempo me culpe, me sepultaron a la idea de lo que pasaba era por mí.

Hoy sé que no lo es, que nunca fue mi culpa.

Solamente estaba rodeada de personas mentirosas, indecisas y conscientes de generar un dolor que nunca voy a entender.

Me gustaría saber sus razones del por qué hicieron las cosas que hicieron, por qué tomaron los caminos que tomaron. Si hubiera una buena razón de por medio que los haya separado de mí o hacer lo que me hicieron, lo entendería, pero no la hay y nunca la hubo. Entonces, ¿por qué?

Pero a la vez, también entiendo que hay cosas que no tienen respuesta, mucho menos razones y que gente así simplemente existe y seguirá existiendo; haciendo las cosas que hacen sin disculparse, sin ver sus errores, inmaduros, por ver como juego el sufrimiento ajeno y aceptarlos con la excusa barata de que son así, que lo hicieron porque quisieron, que lo hicieron porque se aburrieron o peor, que su orgullo no se los permite como si nada de lo que provocaron haya sido su culpa o simplemente no aceptan que la cagaron.

No me generan nada más que pena.

Y risa, me preocuparía por ellos, pero hoy, no me interesan.

Son personas con edad para distinguir del bien o del mal, con la supuesta careta de que disponen de estabilidad emocional y son seres super racionales que no le harían daño ni a una mosca porque no harían lo que no les gustaría que les hicieran o porque van a terapia.

Las peores personas, son a veces las que amamos sin saber cómo ellos son realmente.

Y eso es triste, ya que nunca conoceremos el verdadero trasfondo de una persona.

Por más que se haya convertido en un integrante más de la familia, que lo consideremos un amor o por más años que estemos juntos a ellos.

Un día, se convierte en una de las peores pesadillas o descubrimos lo que nunca esperamos de ellos.

Parecen las cosas más obvias, pero las ignoramos olímpicamente por el cariño, y por la vulnerabilidad que implica amar a alguien ciegamente hasta que te estrellan contra una pared y somos obligados a aprender mediante la experiencia.

Sacar cosas buenas en situaciones de mierda, y resurgir de ellas, es un acto de valentía tremendo y digno de admirar.

Hoy me aplaudo a mí por eso.

Porque sé, que otras personas en mi situación, o vivencias similares, no lo hubieran aguantado. Pero yo lo hice, aún cuándo creí que no lo haría y me hundían más para que no lo haga.

Espero que hayan disfrutado de verme mal, porque hoy, no lo van a ver nunca más.

No los odio, nunca podría desearles el mal ni mucho menos que vivan lo que a mí me hicieron. Sé que están en el ambiente y con la gente que merecen, en el camino que ellos mismos eligieron. Espero que nada les falle o le falte, nunca.

Y que la vida, no se los cobre.

Nunca podremos saber que depara el futuro, pero todo es experiencia, y todo nos sirve, sea bueno o sea malo.

Y si el karma decide algún día despertarse, espero que tengan la fuerza suficiente como para salir ilesos y ver de eso, lo positivo.

Como yo lo hice gracias a ellos.