Hay días en los que no me pasa nada malo, y sin embargo, algo dentro mío está… desajustado.
No es tristeza. No es ansiedad. No es cansancio. Es otra cosa. Un silencio interno que pesa, como si algo se hubiera apagado sin que yo lo notara.
Me levanto, hago lo que tengo que hacer, respondo los mensajes, cumplo con mis tareas. Pero todo se siente como si lo hiciera desde lejos. Como si no fuera yo, sino una versión automática que actúa en mi nombre.
El piloto automático no siempre duele, pero desgasta
A veces me descubro pensando en cuándo fue la última vez que me sentí presente de verdad. No ocupado, no distraído, no "haciendo cosas". Presente. En calma. Conectado.
Y no me acuerdo.
Parece que todo lo que hago tiene un motivo externo: para llegar a algo, para cumplir, para responder. Y cada tanto me pregunto si ser adulto es simplemente acostumbrarse a estar desconectado de uno mismo.
Hay momentos en los que no quiero más motivación
No quiero que me digan que le ponga garra, que salga a correr, que coma mejor, que tenga pensamientos positivos. No quiero soluciones.
Solo quiero entender qué me está pasando sin apurarme a salir de ahí.
Tal vez ese sea el primer paso: dejar de luchar contra el bajón cuando no es dramático. Aceptar que hay etapas en las que no estoy ni bien ni mal, solo... raro. Flotando. Medio apagado.
Y que eso también está bien.
Recuperar sin buscar
No sé cómo se vuelve. Pero sé que siempre vuelvo. No por empujarme, sino por escucharme.
A veces la chispa reaparece en un detalle mínimo: una charla sin filtros, una canción en el momento justo, el olor del pan tostado a la mañana.
Son esas cosas las que me recuerdan que sigo acá. Y que aunque me sienta desconectado, hay partes de mí que siguen intentando hablarme. En silencio, sin gritar. Esperando que yo me calle un rato para poder oírlas.
Recomendados
Hacete socio de quaderno
Apoyá este proyecto independiente y accedé a beneficios exclusivos.
Empieza a escribir hoy en quaderno
Valoramos la calidad, la autenticidad y la diversidad de voces.
Comentarios
No hay comentarios todavía, sé el primero!
Debes iniciar sesión para comentar
Iniciar sesión