LAGRIMAS CAEN SOBRE EL OLVIDO : Una reflexión sobre nuestros tiempos.

El verano del descontento.

Inicia el soliloquio con una figura melodramática secuestrando tu atención

entre el brillo interminable de las pantallas

entre el sonido merodeador de un mundo vivo

en tecnologías multicolores.

Vuela una bandada de pájaros pero no puedes verlos

por estar leyéndome.

[Aún presientes como cantan

acelerando la desigualdad

entre las nubes.

El vapor horizontal rodea de ideas tu cabeza

prediciendo los acontecimientos ligados

al hilo conductor de los versos : agua que fluye

mudando de forma

adaptándo el valor calórico de la declamación.

[En este caso la lectura irresoluble

de idiomas codificados de

cargas culturales.

Vengo de un país distante y oscuro

(¡Qué importan los reinos

allá donde impere el dolor!)

Latiendo en las sombras de la inmensidad tropical

hay un susurro de voces obedientes

Nuestra historia de luces corrientes

arrinconan todos los mitos

que develan

los vicios del hombre

Es por eso que nos desangramos

ante la proximidad de un debacle

que demuestre

que nuestro rumbo es inviable

Como los pétalos que nunca alcancé en tu piel de granito

indiferente ante el rumbo del mundo

hipnotizándome con la oscilación de caderas

y palabras suaves

Brillan tus pupilas en este verso

como el color de una flor inextinguible

sabores ácidos y exóticos

nos demuestran que las galaxias piensan seguir expandiéndose

en destellos de luz.

Ciencia ficción de los meteoritos decorando

los atardeceres

y los platillos voladores

trajeron una guitarra eléctrica

desquebrajando los sonidos

de una antigua misión jesuítica propiedad comunal de la tierra.

Alabando

que exista un alma buena y diga ser poeta y se lance a la aventura

Tropezando

con un mundo de adversidades se alce contento

expandiendo los límites y los espacios de la razón

para entender mejor al mundo

a través de versos confusos y graciosos.

NOTA AL FINAL DEL CUADERNO

talla una mano sísmica

hundiéndo de emoción

los papeles;

Dice:

─Quiero que vueles y me alcances.

─Deseo quemar la dulce flor de los encantos,

─Puedo ver la danza de colores trasgredir el concepto de límite.

Hay joyas que no se ven

pero se sienten

en la ostentación de un destello

próximo

Por ahora lo inhóspito

es el espacio que dispersará tu atención

hacia otros olvidos

girando a la deriva.