Yo tan tuya

Yo tan tuya y vos solo tuyo

Solamente un ente

Vida consciente de su propia existencia

En el abismo sin luz ni fondo ni eco

Solo su voz

Le resuena el propio enojo

Ante la tristeza del dolido

Porque la injusticia es hacia él

Vulnerable ser

Nunca es egoísmo pues le afecta el dolor del extraño doliente

Que solo fue desconocido en el último tiempo

Donde los lazos se desataron

Las manos se soltaron

Los besos dejaron de darse

Pero el alma en pena que vaga en inmundas lágrimas de inconsistencias inconscientes

Es tan culpable como la bestia

Porque cegada por su pequeñez vulnerada e inhóspita por quienes debieron habitarla

Solo sabe tentar con su carne al que acecha por paz

Zarandeando su cuerpo de agobio para ser mordido con enojo

Nadie tiene la culpa

Dos seres

Uno completo otro incompleto

Uno que ama otro que adora

Vulnerados y vulnerables