vísceras de amor

y qué tan glorioso es tener este visceral corazón dentro de mi caja torácica para amarte a ti con este cuerpo (a veces lastimado). nada como una mordedura al alma no repare estas uñas que mordí buscando la calma en el ansía—anhelo de tu sangre, las ojeras que adornan mis ojos porque el hambre me desvela; y soy de apetito voraz e insaciable, nunca lo he negado. temo por el día en que haga consumición completa y la abstinencia se encarne abrazando mis entrañas en agonía porque de ti no hay nada que sobre por devorar. la inanición eventualmente tocará y me entregaré con las manos en alto, porque he comido hasta los huesos en esta devoración emocional de una pasión mortífera como lo fue consumirte por amor.