Las charlas en la almohada
y las risas que nos abrazan.
Un calor intenso,
en el que me siento volando
sobre mi cama.
La comida de todos los viernes,
con el postre más rico.
No sé dejarme ayudar,
sabés que me cuestan muchas cosas
y solo me mirás
para sostenerme con tu silencio.
Me abrazás profundo,
me tocás más allá de mi piel.
La felicidad es ese momento
en que la complicidad se vuelve cotidiana,
y sé que estás.
O cuando vamos construyendo frases en conjunto,
porque sabés bien que tus palabras y las mías
fueron pensadas para ir juntas
en una misma oración.
La propia acción del cariño queda corta
cuando estamos juntos.
Sabés que sos más grande, ¿no?
Porque el tamaño de tu amor
supera todo lo que conocí.
Eso te vuelve más.
Si te gustó este post, considera invitarle un cafecito al escritor
Comprar un cafecitoRecomendados
Hacete socio de quaderno
Apoyá este proyecto independiente y accedé a beneficios exclusivos.
Empieza a escribir hoy en quaderno
Valoramos la calidad, la autenticidad y la diversidad de voces.
Comentarios
No hay comentarios todavía, sé el primero!
Debes iniciar sesión para comentar
Iniciar sesión