Ese día todo cambió, el se preparaba para verla, habían pasado varios meses ya.
Pensó que la mejor manera de hacerlo era por sorpresa, entonces lo decidió, tomó los recaudos necesarios y fue por su mejor remera, esa por la cual ella alguna vez moría, limpió sus zapatillas y sin pensarlo salió al encuentro.
La ruta era larga, pero no era impedimento para él, combinando colectivos y trenes, uniendo zona oeste con capital y después de horas de viajar llegó a destino.
Una sensación extraña lo invadió, la adrenalina brotaba por todos lados, cruzó la calle y la vió, tan hermosa como siempre, tan lejana como últimamente, se acercó y fue contundente
- Hola. Dijo para romper con tantos años de lejanía, seguido de una sonrisa y un movimiento leve de su mano derecha.
-Qué haces aca? Alcanzó a responder ella, con cierto tono de sorpresa y alegría.
-ya te dije, iba a venir solo a saludarte y darte ese abrazo que nos debemos. Respondió él.
-Estas loco. Prosiguió ella, mientras mostraba sus muecas en los cachetes, esas que solo se le formaban al sonreír por volverlo a ver.
Ese día todo cambió, se volvieron a encontrar, el destino tenía algo más para ofrecerles, a ellos, que aunque los años y la distancia los alejaba nunca se olvidaron.
Una vez más, cara a cara como en los viejos tiempos, aunque en esta oportunidad las sensaciones eran otras y el escenario había cambiado tan radicalmente, al igual que ellos.
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Manu Barreto
Soy @huellasinpisar ~Revolución es abrazarnos más~ Virrey del Pino/ Ituzaingó, Buenos Aires, Argentina 🇦🇷
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