Una nueva marca llamada "Yo"

Sí, ya había leído "The brand called YOU" de Tom Peters. Y al mismo tiempo lo determiné como un futuro proyecto pendiente para mí: aprender la lección de las grandes marcas.

En la escena contemporánea, crear una marca personal se convirtió en una necesidad inevitable para sobresalir y alcanzar los objetivos personales y profesionales, sobre todo en el mundo laboral. Pero, ¿qué significa realmente construir una marca personal? ¿Es simplemente una estrategia de marketing o hay algo más profundo y filosófico detrás de este concepto?

¿Qué te hace diferente?

La esencia diferencial de una marca (cualquiera sea) radica en la autenticidad. ¿Qué te hace diferente? ¿Cuál es tu rasgo más notable? A diferencia de los productos comerciales, la marca personal no puede ser 100% fabricada ni manipulada de manera artificial. Se construye a partir de nuestros valores, pasiones, experiencias y habilidades únicas –pero reales–. Para comenzar el proceso, es esencial una autoevaluación honesta: ¿Qué nos motiva? ¿Qué nos distingue? ¿Qué queremos lograr y comunicar al mundo?

El branding personal no se trata de crear una versión idealizada de nosotros mismos, sino de mostrar quiénes somos realmente. Esta autenticidad no solo ayuda a conectar de manera más genuina con los demás, sino que también nos permite vivirla de manera espontánea y alineada con los propios valores y aspiraciones.

La presencia digital

Ok, la realidad es que vivimos en una era digital. Por consecuencia, toda comunicación se extiende, inevitablemente, a los medios digitales. Y es una gran ventaja el amplio alcance de la presencia digital: cada publicación en redes sociales, cada artículo o comentario en un blog y cada interacción en plataformas digitales contribuyen a la construcción del branding personal y a la imagen percibida por los demás. Por este motivo es importante entender de manera consciente cómo nos presentamos en estos espacios y asegurarnos de que nuestra presencia digital sea coherente con nuestra identidad y objetivos (y a la vez, favorable).

En parte es una cuestión de fondo: lo que tienes que decir y lo bien que lo dices. Pero también es una cuestión de estilo. En la red, ¿tus comunicaciones demuestran un dominio de la tecnología?

(Traducción del texto original)

Y con esto, se refiere a usar la tecnología y herramientas de manera tal que, de manera natural, se amplifique la voz de la marca personal. Alcanzar a un público más amplio e interesado. Sin embargo, las redes sociales también presentan desafíos, como la tentación de proyectar una imagen superficial o de ceder a la presión de las expectativas externas. Aquí, la autenticidad vuelve a ser clave: una marca personal sólida se construye sobre la coherencia entre lo que mostramos y lo que realmente somos.

Construcción y coherencia

La coherencia es otro pilar fundamental de una marca personal efectiva. No se trata solo de lo que decimos, sino de cómo lo decimos y, sobre todo, de nuestras acciones. Cada decisión, cada proyecto y cada interacción debe reflejar nuestros valores y reforzar la identidad. En la consistencia del discurso se encuentran la confianza y credibilidad, elementos esenciales para construir las relaciones significativas y duraderas que nos permiten el crecimiento personal a través de comunidades comprometidas.

La construcción de una marca personal también es un proceso dinámico y evolutivo. A medida que crecemos y cambiamos, la marca debe adaptarse y evolucionar con nosotros. Lo que implica una reflexión continua y la disposición de ajustar el enfoque según sea necesario, sin perder de vista nuestra esencia.

¿Monetizar la marca llamada "Yo"?

En el contexto profesional, una marca personal sólida puede abrir puertas y crear un sinfín de oportunidades. Insisto, literalmente no hay límites: "La visibilidad es una forma divertida de multiplicarse; la parte más difícil está al principio", dice T. Peters. Nos permite destacarnos en un mercado competitivo, atraer a personas y organizaciones que comparten nuestros valores y objetivos, posicionarnos como expertos, generar nuevos lazos, e incluso (si sumamos todos los factores favorables) viralizarnos.

No hay literalmente ningún límite a los caminos a seguir para mejorar tu perfil.

Sin embargo, es importante tomar conciencia de que el branding personal no es una solución rápida ni un atajo al éxito. Todo lo contrario. Es un largo camino que requiere tiempo, esfuerzo y un compromiso constante. Ninguna marca se posicionó en lo más alto de la noche a la mañana.

Pensar diferente

A proposito del slogan "Think different" (y no creo sea necesario nombrar la marca para que todos sepamos de cuál se trata), porque la construcciónde una marca se trata de esto mismo: ir más allá de su utilidad práctica y ser llevada como una filosofía de vida. Ser reconocible sin ser nombrado.

Es el poder de influencia.

En el ámbito laboral, destacar en un viaje de autodescubrimiento y autoexpresión que nos desafía a ser la mejor versión de nosotros mismos de manera pública para poder prescindir de una hoja de vida al momento de ser valorados y elegidos. Por otro lado, también vivir con intención y propósito, a alinear nuestras acciones con nuestros valores y a comunicar nuestra historia de una manera auténtica y significativa.

El impacto Millenial

Desde generación Millenial en adelante, las ideas llegaron para cambiar las estructuras en muchos aspectos y el mundo laboral no fue la excepción. Queremos dejar de ser esclavos del concepto de escala profesional y para esto el emprendedurismo y la marca personal se volvieron nuestros aliados. La marca personal se convierte en una cuestión más allá del marketing. Se convierte en un proceso profundo y reflexivo que nos ayuda a comprender quiénes somos, qué queremos y cómo podemos contribuir al mundo de una manera única y auténtica, al mismo tiempo que subsistimos y nos desarrollamos profesionalmente. En este viaje, la autenticidad, la coherencia y la reflexión continua son nuestras guías más valiosas. Al final, la nueva marca "Yo" es la herramienta poderosa para vivir bajo nuestras propias reglas.

Independientemente de lo que estés haciendo hoy, hay cuatro cosas con las que tienes que medirte. En primer lugar, tienes que ser un gran compañero y un colega que ayude a los demás. En segundo lugar, tienes que ser un experto excepcional en algo que tiene un valor real. En tercer lugar, hay que ser un visionario de gran calibre – un líder, un maestro, un previsor “imagineer” (ingeniería creativa). En cuarto lugar, debes ser una persona de negocios – obsesionada con resultados pragmáticos.

Es así de simple: Sos una marca. Estás a cargo de TU marca. No hay un único camino hacia el éxito. Y no hay una sola manera correcta para crear la marca llamada YO. Excepto esta: empieza hoy. O no.

(Traducciones, Tom Peters, 1997)