Si bien nuestros caminos ya no se cruzan
y nuestras rutinas no se extrañan
vivir por separado anhela el vivir juntos
tanto así que aún me daña
escucho todos los sonidos del mundo,
esperando que alguno me de goz
incrédulo yo de pensar que aún soy digno de oír tu voz.
Te busco en miradas y nadie tiene tus ojos
ya no respondo a la magia y dicha de tales focos
eso siempre será extraño
basándome en el resultado
fueron un engaño
sé que sueno iluso y loco
y ojalá pudiera decir que estoy errado
pero que ganas que yo tengo
de volver a ser engañado.
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