Estoy en medio del precipicio,
la frialdad me lame la piel
y la soledad me rodea los huesos
Todos hablan en el ruido vacío
ninguno escucha
Aconsejan desde lejos,
como si no doliera arder por dentro
Nadie ha vivido en mi piel
Nadie sabe lo que es
despertar con el pecho hundido
como si la cama fuera
una tumba blanda
que me abraza cada vez más profundo
Me siento sola
con mis propios pensamientos,
y el dolor de mi cuerpo
me consume lento,
como un cigarrillo encendido
que se fuma mi alma
suspiro tras suspiro
Siento que respiro poco
Que ya no me queda aire,
ni voz,
ni salida
simplemente mi soledad
y mi alma vacía
Recomendados
Hacete socio de quaderno
Apoyá este proyecto independiente y accedé a beneficios exclusivos.
Empieza a escribir hoy en quaderno
Valoramos la calidad, la autenticidad y la diversidad de voces.
Comentarios
No hay comentarios todavía, sé el primero!
Debes iniciar sesión para comentar
Iniciar sesión