Tus manos

Bajo el manto estrellado, en sus manos anhelo hallar,

donde el tiempo se detiene y el amor se deja llevar.

En su tacto encuentro calma, en su suavidad un hogar,

anhelando unirme a su alma, en un eterno soñar.

Como hojas que ansían el viento, mis manos desean las suyas,

enlazadas en un abrazo, como dos almas sin astillas.

En cada roce, en cada gesto, florece un mundo de ternura,

anhelando el día en que nuestras manos sean la escritura.

Porque en el toque se expresa el amor más puro y fiel,

en el contacto se encuentran los secretos del querer.

Así que en mi anhelo, en mi deseo más fiel,

te busco, amada mía, para entre tus manos renacer.