La calle está desierta
Las copas de los árboles se hallan quietas
El viento no se presenta
La noche continúa lenta
Atontada, miro el ir y venir de tu presencia
Veo tu silueta en la vereda
Me desespero por tenerte cerca
Pero, al final, solo me espera tu ausencia
Somos seres inútiles, pienso
Mientras fumo en silencio
Siempre armamos un nuevo comienzo
Para ocultar nuestros problemas necios
La soledad nos carcome por dentro
Es como un ser siniestro
Que nos envenena el centro
De nuestro corazón contento
Lo envenena con miedos
Lo torna oscuro y con resentimientos
Lo envuelve y lo llena de celos
Nos enferma por completo
La soledad a veces es amiga
Me abraza en noches sin alegría
Pero a veces es mi enemiga
Y me condena a una tortura, que nadie soportaría
Hoy en especial
La soledad me hace pensar
Me acompaña sin fumar
Y me canta sin cesar
Con la soledad recuerdo tu andar
Recuerdo tu voz al largarte a llorar
Me acuerdo de tus brazos buscando escapar
De la realidad que no hace más que lastimar
En días de soledad
Pienso en vos sin parar
En tu amor tan especial
Y tu forma de ser, tan original
Vos no sabías el dolor que me causabas
Por eso, decido no culparte de nada
Y pensar en cómo me tratabas
Cada vez que yo me debilitaba
En días con soledad
Sólo me queda esperar
A que un día decidas regresar
Y me permitas volver a amar
Porque, a pesar de todos los problemas,
Todavía busco tu mirada serena
Y decido esperar
A que quieras volver a caminar
(a mi lado)
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