A veces espero verte una vez más en un día al azar en un lugar al azar como si el destino quisiera cruzar nuestros caminos una vez más, me imagino cómo me sentiría al ver tu rostro, escuchar tu voz, sentir esa energía de todo lo que solíamos ser, pero al mismo tiempo tengo miedo. Miedo de cómo reaccionarías. ¿Sonreirías? ¿Te detendrías a hablar? ¿O me mirarías como si fuera solo otro desconocido? Pensar en eso duele más de lo que quiero admitir. Ni siquiera sé qué diría. Hay tanto que quiero decirte, pero las palabras se sienten demasiado pesadas para pronunciarlas.
¿Y si verte solo me hace darme cuenta de cuánto te extraño todavía? De cuánto nunca dejé de esperar algo que ya se ha ido. Así que no lo sé. Tal vez espero verte, tal vez espero no hacerlo. Lo único que sé es que el pensamiento de ti todavía me hace doler el corazón, y no sé si estoy listo para lo que pasaría si nuestros caminos se cruzaran de nuevo.
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