Tal cual

Ya importarme poco puede la vida, si solo tendré mi vida y no podré adquirir, contemplar, ni rozar la tuya. Y eso también no me importa. Cada estado en mi vida es cada motivo derivado de la tuya. Pero si tú no estás, en teoría yo no estoy. Y quizás, nunca estuve.

Pero ya las cosas están ahí, dejadas en el olvido,en el tuyo más que en el mío. Pero si quieres, solo si en algún momento recaes en la necedad de ti, puedes llegar, sin aviso, sin nada si es posible. Aquí, conmigo, lo tendrás todo. No te imaginas las cosas que aguardan. Y si esperas algo más, incluso las conseguiría por ti.

Pero solo si eso quieres, solo si te apetece venir y quedarte conmigo. Y si no, espero sigas guardándome en tu olvido. Al menos debo estar en algún espacio de ti. Odiaría que ni eso pudiera obtener, que simplemente mi rostro para ti fuera una simple brisa al dormir, como si nunca te hubieras dado cuenta de que estaba ahí.

Ahora está bien todo. No bien de manera buena, sino bien de manera resignada. Pues ¿qué más puedo hacer? De hecho, sé que puedo hacer mucho más, pero tampoco creo que seas merecedora de todo esto. Al menos que por un instante voltees, tan solo un segundo, o una milésima, a verme.

Ya dependerá más de ti que de mí. Te dejaré estas notas a tu disposición, para ver si tu olvido también puedes dejarlo junto conmigo.