Sonando la tercera.

Hoy no llego ni a consagrar..

Primera interpelación.

Carta de un mengano a los rasgones.

Hermanos en el descreimiento, hay noches lisonjeras que quieren ser observadas, vividas, para no sentirse solas. Cuando aparecen, envuelven al sueño en un tenue paño de desvelo y dejan que la imaginación haga el resto.

Luego no hay quien madrugue.

Segunda lectura:

San Uno a los del Jirón.

Parábola y movióbola.

Un día alguien me dijo que el tiempo mata los sentimientos como la ceniza apaga los rescoldos de la hoguera. Que no es fácil mantener lozana la planta del cariño que nace de los adentros. Que se aja con cada instante que pasa, con cada distancia que se abre. Que el olvido llena los más de los huecos de la pared de la memoria.

Quisiera ahora saber de él, y decirle que no tenía razón... pero de aquel amigo ya no recuerdo ni el nombre.

Palabra de D.

...

Salmo insustancial

Acróstico 1

Tras los viejos pasos

Olvidados del tiempo,

Rebusco entre rincones

Recuerdos hilvanados.

Ánimas en las sombras,

Luz de ayer.

Bello remanso.

Aquí seguiré.

...

Aleluyas.

Sucederá.

Cuando me sueñes,

hazme bailar como flotando,

haz que mi voz suene profunda y suave,

que mis palabras sean siempre amables.

Cuando yo ande por tus sueños,

intenta que nunca te alarme,

que todo sea sonrisa,

que desees besarme.

Al soñarme procura que no haya prisa,

que el tiempo, en un placer atento y complaciente,

se detenga, que no avance.

Y luego al despertar,

quedará en ti el recuerdo vago,

intangible, hasta culpable,

de que, a pesar de todo,

a pesar de mí,

una vez me amaste.

El Caminante, a veces...

...

Imviable apocalipsis.

Y así sucedió el tiempo de la insistencia iconoclasta en un sucederse intranscendente.

Ite missa est