solo te pido un favor...

existió un amor que reto a los dioses, deshizo el orden natural por no querer aceptar su final

se relata que ella lo amaba de una manera abismal, con fatal terquedad, superando toda lógica en realidad

el fue despedazado por la envidia y ella cayo en un abismo que no entendía

no podía aceptar una vida, en donde su amado no iba a estar así que su desesperación no iba, ni podía terminar

hasta lograr de algún modo, volverse a juntar.

teniendo su dolor frente a ella, sin si quiera poder distinguir quien era, solo restos, pedazos sin forma y el nombre de lo que algún día fue su hombre.

aun así, eso no importo ella empezó a reconstruirlo. para poder volver a sentirlo a pesar que el destino intentaba impedirlo

cada pedazo que pegaba le partía el alma, no solo armaba su cuerpo, revivía su dolor. lo adoraba tanto

que dolía, le dolía saber que había sufrido y no pudo evitar lo que el había vivido

y yo, yo no se si fue el amor, la fe o algún poder antiguo, no lo se

pero dicen que su amado volvió, que la muerte por un instante retrocedió y en su pecho un latido retumbo

yo solo te pido un favor y es que me creas que el amor que yo te tengo gritaría contra la muerte si yo te perdiera. si tan solo lo supieras

En la cultura coreana tienen algo llamado In-gyeon.

No significa destino como lo entendemos,

sino conexión.

Habla de un lazo que el tiempo no olvida,

que une a dos almas, vida tras vida.

Dicen que si dos personas se casan

es porque se eligieron en ocho mil vidas,

y si su ropa rozan caminando

es que ellos se amaron sin recordar cuándo.

Un proverbio chino con sabia elegancia

afirma que si el destino alcanza,

dos almas se unirán sin importar las circunstancias,

aunque vivan separadas

por miles de millas de distancia.

Así que yo solo te pido un favor:

si alguna vez cruzamos la misma calle

y notas el pequeño detalle

que en tu pecho algo retumba,

no creas que es casualidad,

llámalo con voz muda

lo que algún día fue mi alma junto a la tuya.

Existe un cuento llamado

Las cartas que no llegaron.

Él amaba desde lejos

dedicándole versos en completo silencio.

Ella vivía su vida

sin saber todo lo que la podía querer.

Guardó cada carta que le escribió

expresándole todo eso que cayó.

Parecía haber plasmado toda su vida:

escribió cuando estaba herida,

cuando la vio sonreír,

cuando lloraba,

o cuando pasaba a su lado como si nada.

Y aunque siempre fue libre

de esas cartas poder enviar,

él decidió que en silencio la iba a amar.

Así que ella partió,

y su amor jamás le confesó.

No me mires de lejos

ni guardes el amor como él lo guardó.

Si alguna vez me llegas a querer,

aunque sea en silencio o en dolor,

solo te pido un favor:

atrévete a escribirme cartas de amor.

No te preocupes,

yo sé que no eres muy fan del romance,

ya me lo has dicho antes,

pero aquí te dejo una teoría brillante.

Es algo sin precedentes,

lazo tan especial

que ni la física clásica puede descifrar,

pues del entrelazamiento cuántico te voy a hablar.

Dicen que dos partículas al tocarse

quedan unidas sin poder soltarse,

un mundo entrelazado

donde todo está conectado,

un plano invisible

del que nunca te han contado,

que no entiende de lugares ni de fórmulas,

tampoco de leyes que impongan finales

o normas temporales.

Cuentan que una vez entrelazadas

estas partículas quedan marcadas,

como si solo quedara

la conciencia regada

de aquel cruce de partículas en la nada.

Dicen los que entienden

que solo basta con medir una,

apenas tocarla,

incluso solo mirarla,

y en un instante,

de una manera impresionante,

la otra tiene una reacción palpitante.

Pareciera que ese lazo no supiera romperse,

y el universo lo negara mil veces.

Pero ahora, corazón,

dejo atrás los cuentos, la ficción,

estas historias que desarrollan mi imaginación,

pues soy consciente

de que solo somos tú y yo en este panteón,

leyéndote historias de amor.

Solo ruego

porque el entrelazamiento cuántico

no sea solo especulación,

que nuestras partículas aún conserven conexión,

y si existe eso que en Corea llaman In-gyeon,

tal vez en otra vida,

sin dolor,

pueda encontrarte, mi amor.

pero... ¿de que sirve todo esto?

¿de que sirve que busque esperanzas que mi dios no me pudo dar?

¿y si no las hay? yo habría dado todo, con tal de verte regresar ¿para que creer en dios? si ni una maldita señal de que aun me mira desde donde

"dice" que esta

dime que dios permitiría mi agonía

¿Qué dios omnipotente arrastra de rodillas a alguien que amo sin medida?

por eso ya no creo en ti, por que si existes entonces fuiste tu quien lo arranco de mi, no tuviste piedad, ni justicia, ni empatía, que ironía que me recomienden rezarte. ¿Qué tan fuerte debo gritarte para que me escuches sin ignorarme?

acepte tu indiferencia, pero no su ausencia. solo hay una forma de parar esta demencia, buscarlo mas allá de esta existencia. y si la muerte es mi única opción. mientras el frio pasa por mi piel y la sangre no se logra detener quiero hablar contigo en vida una ultima vez

solo te pido un favor, espérame mi amor. ya voy