Tuve un día extraño
un abanico de emociones
se amontonaron
pero no me dieron el aire
que el objeto
con ese mismo nombre otorga
al contrario
me lo quitaron
con una rapidez sorprendente.
Ese mismo día
recibí una invitación
que me devolvió
con la misma rapidez
aquel aire que parecía
que no iba a regresar
al menos así lo siento
siempre
antes de que
contrario a mi intuición
lo haga.
Fuimos al teatro
escuchamos a alguien tocar el piano
y vi
en los ojos del pianista
un destello de esa ilusión
que a veces me olvido que existe
y que también
esta presente en mi.
Me pregunto si ella
se da cuenta
al igual que yo con ese pianista
por el destello en mis ojos
que cuando la miro
siento esa ilusión
que vi en ese hombre siendo aplaudido
eso creo
eso espero.
Quiero que entienda
que justo así me siento
con su presencia
como ese hombre
en ese instante
donde se da cuenta
que convoco un público
que asistio simplemente
para disfrutar de él.
La diferencia que encontré
entre él y yo
es que yo
solo necesito
y espero
una persona en mi público
una única persona
me vasta
para que ocurra;
el destello
la ilusión
y el aire entrando de nuevo en mis pulmones.
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