San Pugliese: una charla con Maxi Acosta

Como parte de una serie de trabajos prácticos para una materia, tenía que ver una película que se proyectara en el BAFICI en abril de este 2024 y entrevistar a alguien que haya trabajado en la película, preferentemente algún director.

Había elegido el documental "San Pugliese": una película sobre el mítico Osvaldo. Al llegar a Cinépolis, en un viernes al mediodía con algo de lluvia, vi la película en la sala. Tras esto, esperé poder charlar con uno de sus directores. Quien me atendió fue Maxi Acosta, el ideario de esta gran pieza documental. Acordamos hacer una nota y la hicimos por Zoom el domingo siguiente. Y aquí está esa charla, desgrabada, para conocer un poco más sobre su trabajo y las dificultades que tocó afrontar.

- ¿Qué fue lo que te motivó a hacer esta película?

- En principio, porque yo soy de Villa Crespo. Nacido, criado y sigo viviendo en el barrio que vio nacer al maestro, que según él es el mejor barrio del mundo. Eso es fundamental en todo esto. Mi relación con Villa Crespo va mucho más allá de ser un simple vecino porque mi papá es integrante de la comisión de cultura del barrio, una agrupación sin fines de lucro que busca promover la cultura, organizar eventos y recordar los aniversarios de Pugliese, tanto nacimiento como muerte. Siempre se hacen eventos en el monumento en la calle Drago. Después, además de realizador audiovisual soy periodista, Licenciado en Comunicación Audiovisual, amo el periodismo, de investigación y documental, entonces esto era como el deseo de querer hacer un documental. Amo los documentales, me atraían desde chico. Cuando tenía 20 años hice un documental con unos amigos, que se llama “Ciudad Deportiva de Boca”, y está en YouTube. Es un proyecto que tuvo Boca en los años 60 de construir unas islas para trasladar la Bombonera ahí, y tuvo mucho éxito ese documental, con una mano de TyC Sports. Entonces, quedé con las ganas de hacer algo en el marco del INCAA. Y Pugliese es otro factor que anduvo dando vueltas en mi casa, en un disco que escuchan mis viejos, de los grandes éxitos de Pugliese que ganó mi papá en un carnaval de Villa Crespo. Pero creo que todo se comenzó a solidificar para hacer esto cuando leí una entrevista a Andrés Giménez de "A.N.I.M.A.L." en la Rolling Stone donde el periodista dijo que él estaba sentado al lado de una estatuilla de Pugliese porque según el cantante, les traía suerte. Entonces comencé a investigar, me encontré con este mundo maravilloso, y sin experiencia logré juntarme con gente para aceptar esta propuesta, como Lola Winer y Santiago Nacif.

- Después de la proyección de la película contaste que la investigación te tomó 10 años. ¿Ya tenías pensado hacer la película o te tomaste este trabajo con otro fin audiovisual o algo diferente?

- El proyecto entero son 10 años, tanto producción, presentación al INCAA, rodaje, investigación. La investigación en total tomó ocho años. Cuando empecé con esto, tenía 22 o 23 años, y ahora tengo 32. Son diez años de un proyecto muy pesado porque nos pasó de todo en el camino. La investigación también fue muy difícil porque hay mucha información que en principio era errónea, alguna de ellas que puede enojar a la familia del maestro o a los músicos, que en la película tiene su apartado especial, como el tema la cooperativa. Y lo malo es que hasta se han escrito libros con esa información errónea, o artículos periodísticos, notas, y eso alguno las repite. Después, el hallazgo de material inédito. Pugliese fue perseguido políticamente en dictadura y también en democracia, y hubo material que consiguió Caro Reynoso por cuestiones legales, y la Comisión Provincial para la Memoria hace un excelente trabajo de recopilación de un prontuario policial muy frondoso de Pugliese que remarca las veces que él fue detenido y espiado tanto en dictadura como en democracia. Y esos archivos no los tenía ni la familia.

- ¿Cómo pudieron conseguir a los entrevistados que aparecieron en la película? Tanto a los familiares de Pugliese, como sus músicos y los músicos del rock. ¿Cuál fue el más complicado de conseguir y de convencer para aportar en la película?

- Con la familia siempre tuve una relación, más que nada con Lydia Elman (viuda) como con Beba Pugliese (hija). Las conocía. Cuando entré a querer hacer esto, se empezó a hacer una relación más estrecha, yendo a la Escuela de Música de Avellaneda donde Beba daba clases, yo trabajaba cerca de ahí en Diario Popular, e iba hasta ahí casi todas las tardes y le hacía preguntas, hablábamos de la vida, y con Lydia iba a su casa en Almagro, donde vivió Osvaldo hasta lo último, y así se fue tejiendo una relación. Después, el resto de los entrevistados fue como una cadena. En algunos casos no recuerdo cómo conseguí los contactos, pero alguno que otro lo conseguí de la familia, otros por algún conocido. Lo bueno es que siempre hay gente dispuesta a darte una mano, que se acerca y dice “yo conozco a tal persona” o que acercó archivos. Después de los entrevistados, Tolosa me dio el teléfono de Abel Córdoba, que no quería aparecer y terminó aceptando por pedido de Tolosa.

- ¿Abel fue el más complicado de convencer?

- De todos los entrevistados que aparecen, el más difícil fue León Gieco. Estuve un año detrás de él. Es muy complicado llegar a Gieco, con su entorno, prensa, porque son estelares, León es un baluarte. No es fácil, y con la pandemia en el medio. Insistí, mandé el proyecto con fotos y todo, hasta que en julio de 2022 estando de vacaciones en las Cataratas del Iguazú, y recibo el llamado de León Gieco. Terminamos cerrando la posibilidad de hacer la entrevista. El segundo más complicado fue Luis Brandoni, llamándolo todos los viernes, pareciendo un psicótico. Estuve como seis meses hasta que aceptó. A él no lo había sumado a la investigación, pero sí fue parte del documental cuando hacíamos un balance de qué nos faltaba, buscando un testimonio como vuelo, y con una figura como Brandoni suma muchísimo no solo por su presencia sino también por lo que él tenía para decir. Yo tenía el dato de que él tuvo mucho que ver en la llegada de Pugliese al Colón. En ese momento él estaba ocupado, a punto de filmar con Robert De Niro. Son gente re ocupada y están a otro nivel. Logramos hacer un espacio y estuvimos 30 minutos en su casa haciendo la entrevista.

- Teniendo en cuenta la avanzada edad de varios entrevistados, ¿costó con alguno hacer el rodaje?

- Beba, la hija, es una señora que tiene problemas de salud y para poder expresarse con normalidad. Pasó que cuando la sentamos frente a cámara para generar un buen clima, aunque ya estaba todo acordado y me conocía, cuando nombra a su papá en el primer rodaje a ella se le iluminaron los ojos y empezó a recordar fechas y todo. Ella es la de mayor edad entre los entrevistados, con 85 años. El resto, todo bien, más allá de la insistencia.

- ¿Qué dato que hayas obtenido en la investigación te llamó más la atención?

- Si tengo que elegir uno, me llamó mucho la atención que Pugliese haya sido perseguido. Siempre se habla de la Dictadura del 76, pero hubo más dictaduras y él las vio pasar todas. Pugliese no tuvo paz hasta el 83, fue perseguido tanto en dictadura como en democracia, fue detenido, fue espiado. El comunismo estaba prohibido y el peronismo lo re contra persiguió a Pugliese. Hablás con la familia sobre este tema y automáticamente ellos te dicen “Perón”. Pero la persecución en dictadura y en democracia fue lo que más me llamó la atención. Y eso hay que remarcarlo porque hubo espionaje, detenciones y persecuciones también en épocas democráticas. Tengo algunos documentos firmados por la policía del año 55 y antes también, donde ordenan la prohibición de la orquesta de Pugliese, eso siendo en plena democracia. Siempre nombramos hechos de la dictadura, que es de lo peor, pero hay cosas que también pasan en democracia. Es algo que hay que corregir, cambia el modus operandi pero el fantasma sigue siendo el mismo. Me llamó mucho la atención cómo le pudo pasar a un tipo que simplemente tocaba y se expresaba, como decía la nieta en la película.

- ¿Te identificás con alguna característica o algún aspecto de Pugliese?

- No quiero pecar de egocéntrico, pero el tipo era muy líder y a mí me gusta liderar, como este equipo en el que formo parte, la investigación, no por el ego sino para llevar las cosas a buen puerto, consensuar, debatir, y Pugliese tenía eso. No era de hablar mucho. Era un tipo muy lider, para adentro en los ensayos muy dispuesto a escuchar. Me hubiese gustado ver cómo ensayaban con tantos instrumentos tantas horas. Y en eso de que se cumplan los derechos, hasta en eso era un líder. Está bueno liderar un grupo y lograr que se sientan bien. A mí me encanta haber liderado este equipo y que la gente se sintiera bien. Haberles dado un buen momento donde nos caguemos de risa está bueno, y este documental nos potencia todo, que nos sirva para el currículum. Destaco el liderazgo del maestro, y me hubiese gustado verlo en vivo.

- ¿Qué esperás que suceda con la película a futuro? Sabiendo los tiempos complicados en los que estamos…

- Que gane el Oscar, ¡ja! La verdad es que está siendo un documental muy exitoso. Fue seleccionado en el BAFICI, que es un festival de cine muy importante, con la primera función agotada en 45 minutos cuando salieron las entradas, y en la segunda función en Cinépolis, siendo viernes lluvioso y de horario laboral, también se agotaron las entradas y la sala estaba llena. No había lugar (me consta, lo vi sentado en el piso). Es algo que me emociona hacer un trabajo, que sea exitoso y reconocido el laburo de uno durante tanto tiempo. Del documental espero lo mejor porque hay una aceptación muy grande, con una nota en Infobae, nos llamaron de un medio de Canadá, hay posibilidades de llevar el documental a Japón y a China, a Europa también donde Pugliese tuvo un paso importante, y lo del Gaumont es un golpe, pero no de K.O. porque ojalá se reabra por el cine, los colegas… Yo le digo al grupo “no nos pongamos mal” porque no se pueda proyectar en el Gaumont, pero la película tiene mucha aceptación y no tengamos miedo porque vamos a poder llevarlo a otra sala, después contaremos en las redes que está casi cerrado llevarlo a una sala muy grande, y luego esperemos llevarlo al interior, a todos lados, para que la gente disfrute, conozca bien al maestro y no olvidar que es un entretenimiento, pasar un buen momento. Pero espero lo mejor, y se lo deseo a todos los que hagan un trabajo así.

Cabe recordar que esta charla se dio a fines de abril de este año. Lo que aconteció luego con "San Pugliese" fue espectacular: tuvo funciones en distintas salas de cine en todo el país, fue proyectado en el Gaumont a fines de julio y también se emitió en el marco del Mundial de Tango. Actualmente y por tiempo limitado, se puede ver "San Pugliese" en la plataforma Cine.Ar Play. Recomendadísima: ¡vayan a verla!