Ella se veía como un icono religioso, alguien
por el que te sacrificarías en un respiro.
I.
Como un imán me ata, me lleva, transporta
a un universo más allá.
Ella y yo somos enemigas aunque
bajo la luna mi rostro diga una mentira
o dos..bueno seis y media como la hora
en la que me pediste que esto te
mandara.
II.
Tan endulzante es tu fachada que
me embriaga peor que un Santa Rita,
que arde a cada sorbo, penetra mi
garganta en plegarias líquidas.
III.
Como discípula bebo de ella, gota
tras gota que cae por mi barbilla,
oh mujer de ojos color fauna y labios
saboreados en mis más grandes pecados
dame tu corazón para comerlo en
ración / por más pobre que
suene / se que si no lo divido
tan solo seré un león codicioso.
IV.
No soy buena, menos devota
tampoco igual a las que sus rodillas
lastimaron al adorarte desde el
pedestal, centro de una báscula
repleta de vidrios bañados en
modestia oculta bajo un cobertor
de soledad.. por eso, dame una oportunidad.
V.
Una sola, una lamida a la flor del impulsivo
criterio de una mujer que te desea dia
y noche sin cesar.
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