el gusto de la fantasía se agría con las madrugadas repetidas
los despertares solitarios de saberte en silencio lejano y saborearte en lo amargo
la noche me mastica sin piedad
y me escupe otra vez antes del sol
no merezco ni la calidez tostada ni el abrigo dulce de la luz
sólo un encendedor robado me ilumina
hirviéndome sin ardor
mis muñecas huesudas con regusto a quemado descascarándose
la boca cosida rellena de parra y burrito
una lengua vieja guardada en el fondo del congelador
carne picada ácida toda
abrasadora en el frío antes del amanecer
no habla pero pregunta si alguien podrá engullirme
y disfrutar mi sabor
sin consumirme.
Si te gustó este post, considera invitarle un cafecito al escritor
Comprar un cafecitoRecomendados
Hacete socio de quaderno
Apoyá este proyecto independiente y accedé a beneficios exclusivos.
Empieza a escribir hoy en quaderno
Valoramos la calidad, la autenticidad y la diversidad de voces.
Comentarios
No hay comentarios todavía, sé el primero!
Debes iniciar sesión para comentar
Iniciar sesión