Extraño el gato que tiene tu hermano, pero él no sabe de mí cómo toda persona que te rodea.
Ninguno de ellos sabe que todo empezó en un día de junio dónde hacía frío y tu mano tocó la mía junto al sonido de un blues. Aquel blues de ese artista que mi cantante favorita odia.
“Me tienes de rodillas, rogando, ¿me ayudarás a calmar mis agitados pensamientos?”
Te visualizaba en mi cumpleaños, cuando vos ni siquiera me invitaste al tuyo.
Tengo miedo de que sepas más de mí y te vayas.
Si te muestro aquello que me aterra, ¿te quedarías?
Sueño con pertenecer, escribir sobre tu pecho mi nombre. Los tatuajes de tus besos que dejaste impregnados en mi cuello aún arden
los anhelos se vuelven tediosos
tu recuerdo me invade y tu aroma me persigue en todas las calles por dónde voy
tu sonrisa que achina tus ojos
tu lengua que se escapa después de cada risa que lanzas
Siento que pierdo el tiempo, pero sigo quieta esperando que puedas abrirme la puerta
El Botánico aún mancha mis botas cómo el día en que te conocí.
Me arrepiento de que toques mi cuerpo, de haberme dejado llevar por el sentimiento y sentir tu piel con la mía. No sabía que después de eso todo sería diferente.
Fui una tonta por creer que está vez sería distinto. Pero fui una tonta porque te quise y te quiero.
Recomendados
Empieza a escribir hoy en quaderno
Valoramos la calidad, la autenticidad y la diversidad de voces.
Comentarios
No hay comentarios todavía, sé el primero!
Debes iniciar sesión para comentar
Iniciar sesión