Y los acertijos en los que hablabas
alterando mi mundo bajo tus palabras.
Había luz y oscuridad, sombras y fantasmas
Y el juego de ser almas gemelas de vidas pasadas.
Tuvimos demasiados misterios y pensábamos que era algo serio
pero ser honestos no era lo nuestro, tocamos el fondo con el resentimiento.
De las cosas que pasaron no hablamos y las dudas quedaron en mis recuerdos,
la realidad es un cristal cubierto de grietas que cubro con la sangre de mis dedos intentando alcanzarla cada vez que se aleja.
Y te estoy dando demasiado poder pidiéndote respuestas
Tratando de entender si hubo honestidad en tus anécdotas,
el tiempo se ha comido más de una década
con mi cabeza dándole vueltas a esas experiencias
y mil cosas que quedaran en el pasado mientras avanzo
esperando tus palabras para tener paz después de tantas vueltas.
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