Bruno estaba deprimido. Podías oler el dolor en sus huesos la oscuridad en sus ojos la herida en el alma pero descuida solo era una persona insignificante verdad? Uno entre millones. A quien le importa no? Sin embargo aprendío a salir solo de ese estado tan deplorable. Empezó a atesorar momentos por diminutos que fueran por el sin sentido que tenían ver los pájaros en los árboles el aire fresco de invierno contemplar el mar sus manos blancas quizá empezó a descubrir cosas que antes no veía a aferrarse a cosas pequeñas que le gritaban sonríe! se feliz! el dolor también es un sentimiento y también muere como todo !entonces empezó a notar cambios empezó a gustarle el sabor de la vida a saborearla de a poco de a ratos para la gente no son más que días sin sentido momentos remplazables lugares vacios personas iguales pero para el , el dolor le dió la posibilidad de ver el mundo de otra forma ya no era un día igual al otro porque nunca lo es algo siempre cambia por pequeño que sea los momento son mágicos si pones parte de tu corazón en ellos los lugares en donde estas son hogar son refugio son aventuras y las personas no hay una que se parezca a otra no con exactitud no en mentalidad no en un millón de maneras son únicas como las estrellas en el cielo . Lo bueno del dolor es que te enseña quieras o no a apreciar a encontrar belleza aún en medio de la oscuridad en medio de la nada en medio del infierno y si sales de eso si te curas si lo consigues si tienes agallas ya nunca vas a ser el mismo de antes. Te lo aseguro.
Recomendados
Hacete socio de quaderno
Apoyá este proyecto independiente y accedé a beneficios exclusivos.
Empieza a escribir hoy en quaderno
Valoramos la calidad, la autenticidad y la diversidad de voces.
Comentarios
No hay comentarios todavía, sé el primero!
Debes iniciar sesión para comentar
Iniciar sesión