Preguntas que queman

1:00 am y se me cae el mundo encima,

me miro al espejo y no sé quién soy,

me siento chica, rota, como si siempre faltara algo,

como si cambiando pedacitos de mí pudiera agradar más,

y me pregunto si algún día voy a ser suficiente,

si mis lágrimas van a dejar de arder

o si mi corazón siempre va a temblar en la oscuridad.

Me duele pensar que todo lo hago mal,

que mi sensibilidad es un error y no mi forma de querer fuerte,

que tengo que esconder mis emociones para no molestar,

pero ¿en qué momento me perdí intentando no perder a otros?

¿Quién se queda conmigo cuando hasta yo me suelto la mano?

y aun así, miro al cielo, converso con Dios y le ruego que un día duela menos,

que un día no me dé miedo ser yo.

Tal vez ser suficiente no es ser perfecta,

tal vez es ser real, aunque tiemble, aunque duela, aunque llore,

porque si me rompo por querer, no estoy fallando, estoy sintiendo.

Y sí, soy sensible, sí, me angustio, sí, me cuesta,

pero no soy un error: soy un corazón aprendiendo a existir.

Algún día voy a mirarme sin pedir perdón por ser yo,

y ese día por fin voy a respirar sin miedo.