escuchame
¿por qué corres?
te juro que no quiero armarme de valor
o demostrar en cambio
las sutilezas de las que me privaron
me enviaron lejos
pero escuchame
¿por qué no me dejas correr con vos?
o caminar si preferís
pero llevame y entendeme
en mis intentos por explicar lo que ando buscando
me tientan las entradas
esas que señalo y de las que después me escondo
de las que después me privo
porque de las sutilezas aprendí a privarme
y ya no me olvido
del conocimiento del océano
de las algas que se asustan
de los pulpos que hablan
y me ahorcan
para arrancarme las verdades de la garganta
nunca les dije nada
respiro por la nariz y mi tráquea es de goma
nunca les dije nada
se los di a entender cuando me explicaron
que siempre buscaron a alguien a quien ahorcar
para sacarle las verdades de la garganta
nadie tuvo tanta suerte como yo
o como ellos por encontrarme
y que les preguntara
¿por qué no corren?
no corren porque nadan, pensé
pero de eso tampoco conocían.
empiecen a correr
grité y me zafé de sus brazos
saquen piernas y empiecen a correr
más de una idea se me ocurrió
uno por uno tiré de sus extremidades
imaginé estrellas de mar en su lugar
pero nunca les salieron piernas
ni renacieron sus largos brazos
me enfrenté a todas las sutilezas
de las que me privaron
y empecé a correr.
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