mobile isologo
buscar...

Por favor, que esta carta arda en tus rincones dormidos.

Jul 8, 2025

115
Por favor, que esta carta arda en tus rincones dormidos.
Empieza a escribir gratis en quaderno

Hace tiempo no escribía,
sentía más claras las palabras en otra parte,
en un lugar donde no necesitan ser materializadas,
solo dichas.

Ahora es todo lo que pido.
Suena gracioso,
como circo en su último acto de la noche;
ansiado, que te llena de nervios y te eriza la piel.

No es este lugar en donde quería desahogarme.
No es a esta hora, fue antes, todo el día.
Es todo el tiempo, todo lo que siento que me falta.
Es no saber si esa mirada dejó de verme
así de repente, sin aviso, sin ganas.

No soy devota a nada más que a mí.
Pero si existe un Dios que te tenga por promesa,
no habría día en el que no me inclinara.
Mientras mis rodillas se partan y la sangre recorra la alfombra,
solo por recibirte en su misericordia.

Quiere obtenerme sin obras,
me anhela por estar tan vacía y rota,
por la intuición idiota
de que mi mundo es rosa, y yo también.
Pero la idiota soy yo, por vender perfección
cuando ni la mitad de ello compongo.

Y me odio tanto.
Me detesto cuando me encuentro defectos.
Me convierto en un huracán que tiene por centro
lindas palabras que nunca nadie dijo
para saberlas mantener más de una noche.
La esperanza, también, de algún día
no tener que rogar menos razones para llorar.

No hablo, pero palabras sobran.
En mi cabeza, se pierden y aprisionan
el pequeño espacio que se encarga
de mantenerme cuerda y estable,
lo ocupan sin sigilo,
rompiendo ilusiones con rabia para nutrirse de ellas.

Ojalá estar paranoica,
solo ahogada con una cuchara de traumas
que no me deja comer, vivir,
que me atraviesa la garganta
con tal de asegurar su existencia.
Mi promiscuo llanto así lo desea. Igual yo.

A veces entiendo a Pizarnik
y el abismo del que tanto hablaba.
A veces escucho a Billie
y me reflejo en medio de la línea de su canto.
A veces me imagino tocando esa canción mía
y sigo llorando en cada estrofa. Aún no tiene final.

¿Qué tan malo puede llegar a ser
que el mundo te toque con su sombra azabache
para señalarte el final del túnel?
¿Qué puede permitirse el amor en estos días
dónde la carne dura menos,
pero se sacrifica más por ella?

Querido diario;
Qué inhumano, qué sofocante.
Qué doloroso, qué asfixiante.
Qué estúpida soy al creer que valgo.
Por favor, para. Por favor, es insoportable.
Por favor, miénteme más tiempo. Por favor.

Me mordí las uñas hasta rozar carne,
enredé mi pelo entre mis dedos
solo para tirar de él.
Me están consumiendo las ganas de soltar
más que aire de sollozos.
Me recorre sin prisa la angustia,
aunque ya me conoce entera.

Me fusilan las ansias de profanar mente,
figurar en cada sueño,
en cada canción de Paramore y Deftones,
y que se sienta frío mi lado de la cama.
Que cueste pensar un "te amo" improvisado,
para que no haya otra sonrisa quebrada
como la mía esta noche.

ℬ𝘳𝘪llo 𝗮𝘇ul

Comentarios

No hay comentarios todavía, sé el primero!

Debes iniciar sesión para comentar

Iniciar sesión