Platica interrogante hacia el amor

Todo comenzó accidentalmente. Una plática sacada, al parecer… sin motivo alguno; hablé de mi timidez, mi miedo hacia el amor; la duda me aquejó, mi miedo hacia aquella figura llamada mujer, todo eso y más… a ella todo se lo conté.

Ella dijo:

-“Encontraras a la indicada, yo lo sé te lo mereces”.

En ese momento mis dedos, mis manos, mi mente y mis brazos; como si de una automatización se tratase; comenzaron sincronizados a escribir. La duda, la curiosidad me aquejó y de repente…, mi talento salió.

Dude.

Pensé.

Escribí…

Y mis versos decían así:

“ -¿Será?

¿Que será de mi?…

¿Será acaso que el amor es un echo, y no una simple leyenda?

¿Acaso me mintieron…; Nos mintieron?

¿Que carajo es de amar?

¿Que se siente no dudar, no procrastinar en base a otra alma, en base al amar?

¿Confiar es algo que pueda dar al gusto del consumidor?

¿Será todo eso del amor, algo más que un simple rumor?

¡Coño!, esta madre ya parece poema; y ni siquiera es algo que uno planea.

La locura de las letras es lo único que me deja respirar.

No es apnea.

Es simplemente un sentir que no se detiene, que no se frena.

Se me ocurre sin mas…

Una vez escribo, no puedo dejar de hacerlo; dejar de parar…

Es como cuando oyes una canción…

Se vuelve pegajosa toda esta sensación.

Pido disculpas por hacer sonar y sonar tu pobre teléfono.

Discúlpame por este enorme discurso.

Simplemente es como te digo; no puedo parar.

Amor…

¿Que es amar?

Me rindo. Por más que pienso no sé qué es el amor.

Soy un despechado; un errante…, un calcetín roto en un olvidado cajón, en un sucio estante; un roto sillón .

Discúlpame…

Excúsame…

Perdóname.

Inspirado estoy…, seguro me silenciarás, dirás; pobre loco, no me interesa, no me pasa; cierto tema en mi, no hace ni sensación.

¿Locura es esta?

¿Dime?…

¿Lo encontraré?

¿Como?

¿Quien me asegura no es leyenda; no es ilusión?

Ya mejor me callo…

Hablé y hablé, hablando estoy.

Shhhhh….

Me auto silencio, voy bajando la voz…

Ojalá…

Ojalá y Dios te oiga; oiga tu dulce, suave, y delicada voz

Le haga caso a tus plegarias, para que yo…; yo por fin pueda encontrar eso que todos llaman “amor”-.

Concluí mis versos, todos como si de una obra de teatro se tratase, ella obviamente vio mi lamento, mi tristeza, vio que yo en mi sentir solitario agonizaba de compañía, que necesitaba otra alma, algo mas que simple séquito de dos. Jugando le ofrecí estar a mi lado, claro… ella no dijo nada, hubo un silencio incomodo, solo callo; me recomendó apenas ayer subir esta breve historia, volverla poesía; claramente eso hice.

Ella al final solo dijo:

-¿Todo bien?

¿Por que no subes esto?

Hazlo dilema.

Hazlo canción-.

Decidí hacerlo poema, y algo más allá que un dilema.

Tu que lees esta historia, sepas que se lamenta mi alma, nada de lo que está anima escribe es falacia, el no miente, solo se seca el llanto de su seca mente, triste historia; puedes oírla con una canción triste, aunque de mi parte yo te recomiendo una trova, artistas aquí te dejo, espero los busques, los oigas. Disfruta esto, y si de llorar se trata, enciérrate lejos, huye del montón.

Autores consiguientes te dejo; búscalos:

Silvio Rodríguez.

Facundo Cabral.

Mercedes Sosa.

Alejandro Filio

Víctor Jara.

Y para concluir.

Violeta Parra.