Pensarte y anhelarte

Todo lo que hago es pensarte

Mis labios murmuran tu nombre con suavidad

De ellos se escapan brisas que trazan con mucha elegancia tu añorado nombre

Por mis pensamientos te cuelas

Llegas en la noche, te escabulles entre mis almohadas y arrojas tu esencia

Para que luego por la mañana lo único que pueda hacer es agitar mis emociones, recordar tales sueños, recitar otra vez tu nombre

Y admito que a veces anhelo otras cosas

Deseo un poco más, tal vez llego al límite de lo que podrías siquiera tú imaginar

Pero mi dedo trazando la delicada línea que bordea tu cuerpo, te confieso, es mi mayor común desvelo

Y con mejillas sonrojadas admito que tu sonrisa en la mañana es mi serotonina hasta la madrugada

Te veré en mis sueños de nuevo

Aguardaré por tu risa matutina

Aguantaré aquellos anhelos impropios de mí

Sabes que no soportaría tenerte lejos de mí

Así que mis labios se desvelarán esta noche, recitando tu suave nombre, acurrucándome en la melodía de sus pronunciaciones