Pensar matutino

Pensé en que es muy difícil ser grande.

Que cada vez cuesta más mostrarse frágil,

sentirse niño,

ignorar al paso del tiempo.

Que tener carga pesada no es cosa de hoy,

sino que del resto de mi vida.

Que la mayoría de personas ni saben que existo

y yo tampoco sé que ellos existen,

quizás nunca nos conozcamos.

Que pareciera añorar los tiempos de antes y aún así no quiero volver a ellos,

la añoranza es mejor,

las cosas tienen que quedarse en su lugar.

Que no todos los días tendré la paciencia para batir bien el café.

Que soy de extrañar mucho,

y por lo general solo extraño recuerdos más que personas,

al menos por ahora

que todavía no soy tan grande.

Que no me gustan las frases repetitivas,

pero en los momentos adecuados

en esos momentos

siempre son las primeras en pasar por mi cabeza.

Que muchas veces no sé lo que quiero

solo sé que quiero algo

y eso está bien.

Que sentir que todo es difícil significa poder sentirse

y escribirlo es una manera delicada de abrirse.

Que la mayor parte del tiempo que faltan las palabras sobran los pensamientos.

Que a veces,

cuando todo es tan arrollador,

el corazón se empequeñece

y aún así continúa lleno de grandes sentimientos.