soy nieta de abuelos obreros
hoy les cuento un poco de la historia.
I.
abuelo del campo
conocía de árboles y animales
de flores y hierbas
nació en el corazón del interior
el mismo que aún sin esperanza
late con fuerza.
de sus bolsillos
caían monedas
de las más pequeñas
reflejo
de pocos pesos en los bolsillos
de poca educación:
es apenas recibir la primaria
soñando con algún día terminar la secundaria
(soñar con oportunidades, buscar un mundo mejor)
en la ciudad conoció a mi abuela,
una mujer de largas trenzas
que de su creciente amor
ofrecería
formaran una familia.
en la educación y el trabajo
la docta movía fervientemente
el viento de su esperanza.
II.
para la historia completa:
al otro lado de mi árbol
los maternos.
con un poco más de suerte
aunque siempre
el trabajo de frente.
en una familia más grande
mi mamá y su hermana
lograban los primeros títulos de la familia
-la primera generación de la culminación de
un cúmulo de sueños-
III
verán
de alguna extraña combinación salí yo
la enredadera de jazmines, de amor, de ternura y de trabajo:
algo hizo que de mi papá y mi mamá
naciera enredada en medio del árbol.
heredera de sueños
con ojos grandes de esperanza
hice los míos propios,
así nací yo.
la historia sigue hoy y no termina:
los valores traspasados por mis abuelos
son los llevo en las manos
-la educación en la ternura
el hacer todo con amor
nunca pensar solo en mí-
por la rama de debajo
por mis hermanas
por mí
por los míos
por los que no conozco
por los que vendrán y los que estuvieron:
el honor y la gloria.
IV.
nunca comprendí de política,
hay mucho que todavía no comprendo.
solo sé que la habito en lo cotidiano
que suelen bombardearlo todo con ella
como si se tratase de pasar una bola de fuego y librarse de la culpa.
pero también sé que decidir es política.
sé que miré al costado y me vi acompañada:
yo decidí creer
en la gente en las calles
en la solidaridad de las manos del pueblo
en el grito colectivo
porque sé
que sostenernos
es lo que nos salvará.
V.
quiero algún día pedirle a mi abuela que prenda una vela para recibirme
para que sientan que sacarse el guardapolvo
alguna vez
marcó una historia
-como la mía, quizás la tuya, la de otro, la de un todos-
quiero decirle a mi mamá que sostenga mi título
que sea parte de su orgullo,
para escribir al final
al igual que para terminar este poema:
por todos los que fueron parte de mi camino,
y por quienes vendrán
también
lo hago.
defiendo la educación pública
con las primeras palabras que salieron de mi boca
al pensar en ella
amor, enseñanza, respeto, lucha.
parte de mi historia nació allí.
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