Para vos, vida.

Para vos, vida.

Gracias por permitirme vivir y estar acá, por darme un cálido y lindo abrazo.

Acá, en absoluta belleza del sentir, siento fuerte el corazón cuando recuerdo que estoy viva y agradezco por ello. No me saques nunca estás ganas de gozo en la vida, no me ahogues en dolor, no me límites, te pido hoy en paz y amor que no duelas más, que no me trabes el habla, que no me interrumpas. Es mi turno de vivir aliviada, porque es lo que elijo, me permito y merezco.

El caos no me lleva, no hace sentir que floto, no me sostiene ni me refugia. En cambio el amor sí, el brillo en los ojos que traspasa la pasión al ver a alguien amar, ser amado, disfrutar su arte y la vida, sí. Conocer, reconocer y reencontrarnos, sí. En todas estas emociones e ir al compás de mi sentir me invadió un orden, el orden en mi mente y corazón.

Gracias por latir.

Gracias por permitirme Ser.