Como abunda la tristeza y se escurre entre mis dedos diariamente, incluso si niego mi verdadera naturaleza con el transcurrir del tiempo, algo está, algo realmente punzante atravesando cada centímetro de mi piel hasta volverme en un caos irreparable. Me recuerda la insuficiencia y el como a pesar de mis esfuerzos constantes, nada se destaca, nada me destaca. Poco a poco voy perdiendo el interés y el amor a lo que añoraba cada momento. Me estoy perdiendo, me agoto, el cansancio por mis malas decisiones me atormentan y complican mi sueño, los planes a futuro que se estropearon fugazmente, no tiene fin. Las interrogantes que mi propia cabeza crea sin filtro, ahogándome en un espacio donde me hace creer que no soy capaz de nada, y lamentablemente, lo sigo. Mis muñecas se quiebran, mis ojos se inundan en lágrimas, mis piernas tiemblan y ese pensamiento de finalizar con todo una vez más se hace presente, no sé si realmente le tuve alguna clase de miedo, o simplemente no estoy preparada para verme caer. ¿El mundo puede ser tan cruel, o la crueldad está realmente en nuestra cabeza?

Lyn.
Allí, en ese rincón olvidado de mi alma, se enredan las dudas y las nostalgias, formando un nudo oscuro que aprieta mi pecho y ahoga cualquier intento de alivio.
Recomendados
Hacete socio de quaderno
Apoyá este proyecto independiente y accedé a beneficios exclusivos.
Empieza a escribir hoy en quaderno
Valoramos la calidad, la autenticidad y la diversidad de voces.
Comentarios
No hay comentarios todavía, sé el primero!
Debes iniciar sesión para comentar
Iniciar sesión