ojalá poder escapar de mí.

¿me había sentido triste antes? un sin fin de veces pero ninguna sensación se comparaba con la que estaba experimentando en ese momento. era como si cada mínima partícula de mi ser pesara una tonelada completa, como si todos los órganos de mi cuerpo dolieran, como si la ropa que vestía fuera incómoda, y aunque me dolía la cabeza y sentía unas ganas desmesuradas de llorar, nada salía de mis ojos. me había sentido triste antes, pero nunca había vivido en carne propia esa fea sensación de no sentirte dentro de ti misma, de sentir que no encajas en lo absoluto en este mundo; las lágrimas salían pero no las veía, estaba en mí pero al mismo tiempo no. sentí que era tan invisible ante mis propios ojos, simplemente no sentí que perteneciera a ningún lugar en definitiva.

nunca-nunca antes me había sentido de esa manera. era un dolor tan intenso, qué podría jurar que aquello se había convertido en algo físico; se sentía como estar dentro de una piscina profunda y helada, quedándote sin aliento mientras el agua entra cada vez más en tus pulmones hasta qué-de manera eventual dejas de respirar y comienzas a flotar sin algún pensamiento o sensación de por medio. creo que sentirse de tal manera es un poco- ¿normal? o al menos eso dicen todos a mi alrededor "todo va a pasar, sólo es un mal momento" pero ¿por qué lo siento eterno? ruego cada segundo que todo esto desaparezca—detenga, ruego por volver a dónde nada dolía pero; esta es la vida- esto nos hace humanos después de todo. no podemos huir de la tristeza por más que la evitemos- siempre estará ahí aunque no se haga notar del todo. sufrir en cuerpo y alma para existir. huir no es opción.