A orillas del río yacía eternamente dormida.
Flores bellas otroras adorno de sus pensamientos permanecían en su vestido.
Caleidoscopios de otros tiempos la observarian eternamente en ese instante.
Su forma de amar y padecer la realidad serian el legado que estos ojos apreciarían a la lejanía atónitos.
Pero más admirarian la preciosidad del retrato que han dibujado mil manos mil veces.
Postrada bajo el yugo opresor de quienes dijeron amarla alguna vez, rompió con el contrato de la realidad. El hilo natural se cortó por el dolor del desamor y la perdida.
Toda la vida no supo sino obedecer mandatos, cálidos consejos o arbitrios adornados(¿Hay diferencia?)
El rechazo del amor más querido...
Solemos concentrar la significancia del mundo entero en la correspondencia del otro.
Amamos/odiamos en un ser a todos los demás según la respuesta de una carta perfumada...
Padeció entonces en una persona el desamor y la perdida material de su ser más querido
Encontró su única libertad en la locura, se alejó tanto que
no importaban ya las palabras ni el deber
Solo en el agua encontró la tranquilidad, toda una vida esperada
Roto el pacto con el mundo fluyo hasta disolverse de lo que alguna vez fue
*Falta pulir*
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