Háblame del hábil guerrero que en su largo extravío tras haber arrasado la metrópolis y su ciclope/castillo, conoció las ciudades y el genio de innumerables gentes, muchos males paso por la ruta de sus días luchando por sí mismo y por su vida y la vuelta al hogar, de sus hombres y mujeres, a estos no pudo salvarlos, en las propias locuras hallaron la muerte !insensatos, destruyeron las banderas del sol, febo
Irritada la patria, los privó de la luz del aurora
¿Ser o no ser? Ser ser ser, “tener y no ser”, canto de sirenas, yo conozco el canto se las sirenas y embriagado escuche sus canciones, bese sus labios burlando al mago del nihilismo, y volví a mi barco, a mi mástil, llamado voluntad.
De este mundo circular, de este oceano el navegar, de este sesgo poder ver, y cuantas quimeras a vencer
Para encontrar el respirar de dios
El palpitar del todo, donde volver a Ítaca
Volver a ítaca, el eterno retorno a la odisea
El eterno retorno a ítaca
Pero aca estoy, donde forzados mis placeres
Busco develar, y el canto de las sirenas
Cuando las ves pasar, preguntan,
¿Cómo es que le va al gran Alejandro?
Muy bien les tienes que contestar.
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