Noche de Mostras

Apenas estoy empezando a delinearme y ni siquiera estoy segura de hacerlo bien. El jueves pasado pude ver como hay quienes usan su cara como un lienzo, y qué bien lo hacen. Cuándo mi amiga Naza me pidió que la acompañe a Noche de Mostras ni lo dudé, sabía que iba a ser una experiencia jugosa pero jamás me imaginé lo apasionante que podía ser ese mundo. Mi amiga Naza se draguea hace tiempo pero esta era la primera perfo acá en la capital, ella se abrió camino en su Santa Fe haciendo todo tipo de perfos, festivales y eventos mientras iba explorando a su drag, el Jueves le tocaba competir con otras tres mostras en la Noche de Mostras. Una pensaría que un concurso, cualquier concurso, está lleno de frivolidad, de aparentar, de fingir, pero la honestidad que yo vi en ese escenario pocas veces la encontré en otros. Cuatro competidoras en dos camarines cada una con sus vestuarios, su make up y su crew. El maquillaje es sublime, y lleva su tiempo, yo me sentía una tarada que apenas se le anima al rimmel y al labial, ellas conocen su cara tanto, que deciden qué destacar, qué ocultar y qué inventar, es como si pudieran elegir que cara usar cada noche. El vestuario es fundamental y realmente estas mostras estaban muy comprometidas con esta área, cada detalle, cada lentejuela, cada cairel, catsuit, peluca, cada cambio pensado en función del show, con sorpresas, con trucos, con elementos, hacen magia. Pero lo que más me gustó es el compañerismo, el estar ahí ayudándose entre todas, compitiendo en el escenario pero tendiéndose una mano en el camarín. También sentí que esto para ellas es muy importante, no por el premio, no por la perfo, por el lugar, por el intercambio por poder existir y expresarse de manera segura, en un lugar seguro dónde todas te esperan con los brazos abiertos y nadie te juzga. Entendí lo complejo, el tiempo invertido, el trabajo, la cantidad de recursos necesarios, las historias de cada una, el activismo detrás de cada perfo. El público encendido sintiéndose parte del show y agradeciendo la existencia de ese espacio, de esa noche en dónde cada quien puede ser quién quiera y no hay peligro. Y esperando la próxima noche de mostras, el próximo evento, montándose en casa, practicando nuevas perfos, cociendo otro vestuario, esperando nuevamente poder habitar ese deseo en un contexto amigable, a sabiendas de que todavía afuera falta mucho, a sabiendas de que afuera no es seguro, a sabiendas de que hay que conquistar todos los espacios. Entonces la Noche de Mostras se vuelve una trinchera dónde todes son bienvenides y la perfo, una excusa y la brillantina, una consecuencia, estas Drags se montan y batallan mientras van haciendo la revolución un lip sync a la vez.