No mereces que te extrañe, para ti yo solo fui una parada más , cuando para mí tu te habias vuelto mi hogar.
No mereces que te extrañe, al tratarme mal cuando yo solo intentaba comprenderte, ignorando el daño que me podías causar.
No mereces que te extrañe, no valorabas mi presencia, cuando yo anhelaba el día en poder verte y sentir tu esencia.
No mereces que te extrañe, si cuando nos veiamos me rompias el corazón con tu indiferencia sin razón, ahora creo que me siento un poco mejor, pues tu falta de empatía solo me causaba desilusión.
No mereces que te extrañe, pero aún así lo hago, porque a pesar de todo,
tengo algo de tí en mi ser, el cariño y memorias persisten y es algo que mi razocinio no logrará comprender.
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