Mi historia comenzó antes de que pudiera respirar por mi cuenta, antes de que mis ojos siquiera se abrieran a este mundo. Mientras estaba en el vientre de mi mamá, permanecí inmóvil durante casi 12 horas, y los doctores creían que no iba a sobrevivir. Al nacer, me diagnosticaron miocarditis infecciosa, taquicardia y dos soplos en el corazón, y no medía más que la mitad de una mano a mis 8 meses.
Los médicos me declararon muerta y preparaban todo para la morgue. Pero mi mamá, aun estando apartada de los caminos de Dios, declaró vida sobre mí y mandó a hacer una cadena de oración por mi vida.
Entonces, cuando todo parecía perdido… empecé a respirar por mi cuenta. Desde ese momento, Dios mostró que su plan no depende de diagnósticos ni circunstancias humanas. Me trajeron a Buenos Aires a los 11 meses, comenzando así el capítulo de mi vida que Él ya había escrito.
✨ Versículo: “Antes que te formase en el vientre te conocí, y antes que nacieses te santifiqué; te di por profeta a las naciones.” – Jeremías1:5

eli l
Soy una joven cristiana con un estilo de vida diferente y con una mirada al mundo diferente Espero que les guste mi contenido
Recomendados
Hacete socio de quaderno
Apoyá este proyecto independiente y accedé a beneficios exclusivos.
Empieza a escribir hoy en quaderno
Valoramos la calidad, la autenticidad y la diversidad de voces.
Comentarios
No hay comentarios todavía, sé el primero!
Debes iniciar sesión para comentar
Iniciar sesión