"Melarchía"

En el tercer invierno haz abandonado, te aburrió tomar mi mano al caminar.
Extraño el olor de tu acompañamiento, a ti te dio miedo mi respirar.
Toma tu mentira y conviertete en verdugo, tienes derecho de dejarme en estado terminal
Recostado pensando en como termino todo, tu seguiste libre como un animal.

El tósigo sabor de tu belfo entero me hizo intentar querer, aún era muy pronto para poder amar.
Mi absurdo sentimiento de camelar todo, me enveneno al probar tu acento que brotaba una mentira más.
La risa que expresa la crueldad del mal, corrompe el ascentismo que no tienes en tu espiritualidad.
Buscabas momento de tranquilidad, tus labios probaban mi nobleza del ateísmo que nunca mostro dualidad.

Lo peor de este desastre, el error de recibir este desarme, solo fue la acción de matarme.
Y mi golpe de suerte lo di, cuando jamás te dañé ni incursione mis habilidades de mentir y lastimarte a ti.
Todo fue real y eso no te importo, intentaré no volverme adicto a tu sabor.
Pues el aroma que expandes sólo es el peligro de inhalar tu escencia que no es ni amena ni de corazón.

Te enterré cuan mineral por lo chico de tu emoción, el fantasma que apareció, le puse una fogata a devoción.
Desperté la mañana siguiente y ya se había ido, pero me pidió plasmarlo en un escrito como una inocente y no dar un veredicto.
La serenidad que plantaste en mi interior, se conviritó en guerra emocional por querer extinguir este souvenir.