Máscaras

Un día común, un día normal.

Mi cuerpo pesa con la carga de tener

que pasar todo el día oculta.

¿Qué parte de mi saldrá hoy?

¿Qué personalidad se mezclará y

no llamará la atención para no ser vista

y poder ocultar todo, ocultarme, en las sombras?

Tantas, miles de caras, puedo usar en un día.

Niña responsable e inteligente para ti,

es una adolescente que se sobreexige para mí.

Una loca y enferma mental para ellos,

es una niña rota que intenta pegar

cada fragmento que rompieron de ella.

Elijo una, la acomodo y me voy.

Llego, la dejo y me la cambio por otra.

Nadie lo ve, nadie me ve

¿En serio nadie lo ve? ¿Alguien sabrá

que la parte que conoce de mí,

no soy yo completamente?

¿Alguien me conocerá?

Una rutina, un secreto cargo en mi cuerpo.

Mis manos y mi cara.

No me reconozco,

no sé quién soy,

cambie tanto, fingí por mucho tiempo

ser alguien, algo, que no soy o quizás si lo soy en secreto,

pero la función debía continuar,

y no me importo,

no me importo ya no conocerme, ya no ser la misma

solo debía complacerlos ¿O complacerme?

Creando una idea, una persona, que no era yo

para poder encajar y tener el estilo de vida que siempre quise

o con el que no me iban a juzgar.

Mis máscaras llegaron más lejos;

llegaron a otras caras, otros cuerpos,

yo puedo verlos.

Puedo ver a las personas cambiar su mascara

pero ¿Por qué nadie me ve a mí?

Puedo saber cuándo usan una contra mí

¿Será otra de mis mascaras?

Coleccioné tantas que no las conté

Algunas las perdí, las quemé

¿Algunas serán permanentes?

No lo sé.

Quiero quitármelas, mostrarme

pero no podré saber cuándo estaré sin ellas

no reconozco mi persona,

no sé quién soy o debería ser o era.

Quizás hace mucho tiempo deje de usarlas y nunca lo supe

porque me perdí en el camino de intentar

ser plena.