Es extraña esa forma que tiene la gente de querer halagarme cuando solo me demuestran que no están entendiendo.
Cómo van a elogiar mis escritos si reflejan que me estoy desangrando.
Es un asco.
No me mires si no me vas a ver
el alma
rota.
Desconcertada, haciendo equilibrio sobre esa soga que es mi vida.
Inestable.
Sin saber donde termina y sin saber caminar hacia atrás.
Y si salto,
partes rotas como vidrios punzantes me esperarán,
que es mi corazón
y ya me delató.
No existe nadie que sepa volar y pueda rescatarme.
Estamos grandes.
Dejemos de jugar.
Tengo miedo de quedarme quieta y descubrir, entre charcos de rimel, que todo esto es cierto:
Que no me van a salvar.
Se van a quedar ahi mirando
morbosos, como siempre,
que me desangro.
Y van a aplaudir mi arte
pero no lo van a entender.
Recomendados
Hacete socio de quaderno
Apoyá este proyecto independiente y accedé a beneficios exclusivos.
Empieza a escribir hoy en quaderno
Valoramos la calidad, la autenticidad y la diversidad de voces.
Comentarios
No hay comentarios todavía, sé el primero!
Debes iniciar sesión para comentar
Iniciar sesión