I
dime,
dime, lunita,
tú que vigilas desde el cielo,
¿cómo haré para que él me ame?
¿podré esconder mi amor
bajo sus costillas,
y así, cuando su corazón
quiera dejar de latir,
yo lo sostenga?
¿puedo ofrecerle mis ojos
para que, al fin,
aprenda a mirarme
como yo lo miro?
II
estoy cansado
cansado de esperar,
cansado de las promesas huecas
que pronunciamos en nombre del amor
¿quiénes somos, lunita?
¿quiénes nos creemos,
para jurar, prometer,
llamar al amor por su nombre
sin entenderlo?
nada
eso somos
yo, menos que nada
un recipiente vacío y roto
Si te gustó este post, considera invitarle un cafecito al escritor
Comprar un cafecitoRecomendados
Hacete socio de quaderno
Apoyá este proyecto independiente y accedé a beneficios exclusivos.
Empieza a escribir hoy en quaderno
Valoramos la calidad, la autenticidad y la diversidad de voces.
Comentarios
No hay comentarios todavía, sé el primero!
Debes iniciar sesión para comentar
Iniciar sesión