Las palabras y las miradas no valen nada
Ni mis sueños ni mis esperanzas empolvadas
Nada llora porque nada crece ni florece
Ni se mece entre esa Cordelia
Añorando la vida no escrita que imaginé
Mis recuerdos no son veraces
En el fondo sé que tampoco mienten
Sé que nada es real pero nada es todo mentira
Existió aunque enterrado esté entre cenizas
La inspiración me delata porque de todo brota
El piano, la música y la acústica me transportan
Me llevan lejos y cerca a ese mi lugar soleado
Cercado con púas y navajas afiladas
Me desgarran y me cosen como si nada yo fuera
La tierra quema y nubla todo a su paso
Mi reloj aguarda el tiempo donde todo sea perfecto
Se quedó atorado y no he podido romperlo completo
Mis lagrimas se cristalizan porque no oyen los ecos
Las personas, los paisajes y todo me es extraño
Me despido de todo lo que nunca me sonrió
Atesoro y me grabo en cada esquina
Esperando estoy siempre, espero siempre
Nada llegará nunca, eso es lo que temo
Mi alma no muere y mi espíritu se mantiene
No muero pero estoy sedienta de lo que nunca poseo
Nunca llega y no sé ni qué pensar
No sé qué decir, no sé que sentir
Me permito muchas cosas, a mi alcance no están
Solo quiero dejar de sentir
Quiero sacarme el corazón
Quiero examinarlo y sacarle lo que ya no le sirve
Quiero que mi corazón obedezca a mi mente
Quiero que mis palabras sean sentencias
Quisiera que ser realmente algún día mía
Realmente mía
Que lo que mi corazón espera o quiere no me ate
Quiero ser dueña de lo que siento
Quiero ser dueña de lo que veo
Quiero buscar a quien me busque
Quiero borrar a quien me ha borrado
Solo quiero amar a quien me ame.
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