Libros

No hay bien más deseado que el comenzar un nuevo libro: un nuevo mundo, una perspectiva distante y a la vez cercana. Soy fiel creyente de que, no hay mejor manera de disfrutarlos que leer de a poco, casi saboreando cada página...¡Tal como una buena comida! mordiscos lentos y precisos, para así, no dejar fuera, de nuestras papilas gustativas, a ningún sabor.

El mundo al que nos sometemos en cada libro, es el fiel reflejo de nosotros mismos, es por eso, querido lector, que debes cuidar tus ojos tanto como tu mente, deja afuera cualquier texto que perturbe tu alma; haz de los libros un refugio, al que puedas recurrir esos días donde todo es tan pesado.

¿Cómo eres para elegir un libro? ¿Tardas mucho?

¡Ay de ti, querido lector! si me acompañaras a una librería, estoy más que segura de que te frustarías, y te entiendo, hasta yo me enojo por eso. Hay tantas opciones que cada una de ellas, es tan importante como la otra. Muchas veces voy con una lista mental, de manera que podría ahorrar más tiempo, pero, no es así, cada opción que se presenta ante mis ojos es como el encontrar oro puro.

Hay tanto por leer, mundos nuevos por explorar, perspectivas y vistas de lo cotidiano por abordar. ¿Será suficiente nuestro tiempo en este lugar? ¿Podremos conocer más allá de lo que se espera? ojalá así sea, porque la ilusión de una vida abundante de conocimientos, es lo que me motiva a seguir.

Querido lector ¿Qué sientes tú?