Las estrellas me llevaron a casa

He vivido en muchos lugares, algunos más fuertes pero fríos, otros cálidos pero frágiles. Existieron varios hogares que construí con esfuerzo y me mude,hogares que sin avisar, me hecharon.

Deambule por varias calles, persiguiendo luces que podrían ofrecer cobijo. Algunos me dejaron entrar, prendieron las chimeneas, y otros, me cerraron la puerta en la cara. Hasta que te encontré.

No había puertas ni ventanas, apenas unos cimientos que podían sostenerse. Al entrar, no tuve que buscar la leña, porque la llama ya estaba encendida, pero tu calidez no se consumía, era serena, suave y constante.

Decidí quedarme a vivir ahí, construir poco a poco lo que hacía falta. Añadí ventanas para que la luz del sol entrara, puertas que abrían paso a nuevas cosas. Las paredes se llenaron de nostalgia, donde lo único que importaba era estar juntos.

Quiero quedarme aquí siempre. No porque no pueda vivir en otro lado, sino porque ningun otro hogar se ha sentido tan merecedor, tan amoroso, y tan necesario.

Tampoco creo que contengan el sentimiento del perdón, y sus caricias tiernas,para el que busca quedarse también.

Mi hogar, se quedara en el lado izquierdo de mi pecho, siempre acompañándome a donde sea que vaya, y siempre, esperando a que vuelva.