Había una vez una habitación gris, sencilla, sin mucha más decoración que una cama, una ventana, el típico escritorio y su silla, junto a la erudita biblioteca.
Enserio, nada más.
¿Pero qué habrá entonces para resaltar? me dirás.
Y yo, recordaré el espejo enfrente de la cama, en el cual múltiples veces me mire, donde todo lo gris predominaba, extendiéndose por mi cuerpo.Por mi alma.
Recordaré ese espejo, el cual mostraba en su reflejo, lo mundano de la vida.
Aquel espejo, el cual a todo le quitaba toda la importancia a los colores, a la vida.
Recordaré aquel reflejo de la mente que no sentía nada. La mente que rara vez pensaba, y la que rara vez se animaba.
Recordaré aquella cosa, que por nada su corazón palpitaba. Aquella cosa gris que un humano parecía, pero nada de humano tenía.
Me recordaré a mi mismo, una y otra vez, mirándome al espejo.
Una y otra vez, aquella cosa gris.
Una y otra vez, nada soy, y nada seré.

Black Cat
Holaa, me gustaría compartir los textos que hago, es algo que me gusta hacer y que los demás lo vean
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