huéspedes y espera

solo Dios sabe mi más profundo sentir,

todo lo que mi mente maquinó por meses se hizo real,

intento respirar lo más profundo posible, el aire abandona mis pulmones y le da vida a otras almas.

sé que estaré diez vidas y una más dejando de verte en versos.

¿Qué pasa si mi corazón se acelera al oír tu nombre?

todo es más real ahora que tus hebras no son carmín, no hay nada que acariciar por las noches, solo hablo en en sueños (con lo que éramos/yo, que ya no soy)

pensé que llegaría a casa pronto pero todas las luces se volvieron rojas instantáneamente.

oh no, mi alma cae por una séptima letra en el alfabeto, y una última consonante al pasar.

[. . .]

Lo que pudo ser hoy no es,

no te besaré en las noches, ni mis hijos tendrán tu ojos

nunca sabrás mis más oscuros secretos, ni cómo me gusta el café

Ninguno conocerá la idea de amor del otro, o cómo se ve al despertar

no podré enterarme de quién creías que era, o qué pensabas de mis versos, (que tenían tu nombre entre letras)

jamás sabrás en quién me convertí, o quien fui en otras vidas,

y yo, que nunca tendré ni mínima idea de si tus poemas eran cierto, si tus crónicas eran verídicas

ya no veré tu pelo rojo desordenarse por el viento, ni podré estar en tu pecho mientras duermes.

yo seré un extra, y no llegaré a ver, (jamás)

tu última respiración, ni sostener a tu mano en ese momento.

[. . .]

busco tus manos caminando en la calle,

y tus ojos se cruzan con los míos,

desde que entré al cuerpo de mi madre lo he estado haciendo,

(buscándote)

e incluso antes, en mis mil y un vidas

todo es tuyo, por vos,

toda mi mente, las palabras que sé y las que aún no he aprendido,

lloré por tu falta al nacer,

y aprendí tu nombre con dulzura,

he amado partes de vos en mis otros amores,

cada manuscrito podía ser para vos,

buscaba (de nuevo)

que todos los calles sin salida me lleven a tu casa (mi hogar)

todas las cosas de mi vida, en otoño

cuando mi cuerpo se adormecía en verano,

o en el momento de no sentir la nariz en invierno,

cada cosa que hice, cada secreto,

cada paso en falso,

llevaba al camino de tus brazos.

[. . . ]

te espero y no vienes, te amo y no vienes

grito tu nombre en madrugadas lluviosas,

mis sueños buscan tu rostro, intentan armarlo, para encontrarlo,

desde la más pura pena, y el pozo más eterno,

en el destino más marcado,

mis labios claman los tuyos,

mis caderas, tu tacto.

no hay nada que me de consuelo,

la paz no es opción sin tus dedos

muero de sed en desiertos inventados por tu ausencia.

mi voz se pierde en el viento,

sos aire fresco

en mis noches de verano,

te llamo pero la muerte está más cerca.