Llevo mucho tiempo ocultando lo que verdaderamente siento sabiendo que ya no están en mi vida.
Aunque nos lastimamos, pensé que nuestra amistad iba a durar para siempre. Sé que fui ilusa, pero recuerdo como planeabamos nuestra casa de ensueño: Cada uno en su habitación, aunque ella y yo, decíamos que ibamos a ir a la de él para molestar. Con un patio lindo, la música no tan fuerte hasta tarde y mucha comida rica. Solíamos decir que íbamos a ir juntos a la facultad y que íbamos a ir a merendar todas las tardes.
Trato de no pensar en ustedes por mi bien, pero aún no logré tirar los regalos que me dieron, tampoco pude borrar las fotos que tenemos. Extraño nuestro recuerdos y lo que éramos, nuestros momentos más chistosos, inclusive los más tontos. Extraño las palabras que inventabamos a diario, era divertido crear nuestro propio diccionario. Extraño cuando nos sentábamos juntos, lunes y miércoles con él, el resto con ella (aunque los martes y los viernes solo a segunda hora, el profe de matemáticas no nos quería juntas porque hablábamos demasiado)
Me acuerdo de todas las juntadas, también de las que nunca logramos concretar, pero que planeamos con dedicación. Me acuerdo de la primera vez que salí sola de casa, ahí estaban usteden para calmar mis nervios. Me acuerdo de como fuimos al chango solos, fue antes de ir al colegio y yo tenía mucho miedo, pensaba que no íbamos a llegar a tiempo y que mis papás se iban a enterar. Ustedes se reían de mi paranoia, pero admito que después quise seguir haciéndolo.
Me acuerdo de todas las veces que lloré y ustedes eran los únicos que me entendían, los únicos que me daban su hombro para llorar y los únicos que no me juzgaban cuando no dejaba de sentirme mal.
Me acuerdo que odiaban que yo los invitara siempre a mi casa, pero también me acuerdo que venían igual para que no esté sola. Me acuerdo que les gustaba el asiento que estaba al lado de la pared, a mí también, pero siempre me ganaban y terminaban quedándose ahí.
Ahora que tengo los dos asientos para mí sola, estar del lado de la pared es un recordatorio de la ausencia de ambos.
Me gusta pensar en los buenos ratos que pasamos juntos, nuestras charlas siempre estaban plagadas de chistes y nunca faltaban las risas.
Siempre llevaba plata de más para que comiéramos todos. Compré un termo para que él no jodiera con que tenía sed (aunque después terminé extrañando sus quejas diarias de no tener agua). Tenía lapiceras para prestarles, hojas y cartón para darles y, cuando me acordaba, también llevaba comida para comer en clases.
Trataba de llenarlos de abrazos cada que podía, él lo odiaba, pero había oportunidades (muy escasas) en las que me los correspondía con amor. Ella siempre estaba disponible para dar y recibir abrazos, me encantaba que fuera tan cariñosa como yo.
Con mirarnos a los ojos bastaba para saber qué nos pasaba, cómo, cuándo, quién/quiénes y el por qué. Ninguna amistad me conoció tanto como ellos, pero era feliz siendo tan auténtica.
No existía la vergüenza, éramos capaces hasta de lo más humillante si estábamos juntos. Nos cubriamos de todo y de todos, nos defendimos a capa y espada. Cuando alguno estaba mal, el resto se encargaba de hacerlo reír, siempre lo conseguíamos. Hacíamos todo juntos y creo que eso es lo que más me duele.
Cuando se fueron, se llevaron una gran parte de mí y desde entonces no soy la misma persona. A veces me siento incompleta y no logro entender lo que me pasa, pero luego recuerdo que ya no están ahí, ya nunca voy a salir al portón para abrirles y reírnos instantáneamente cuando nos veiamos, aunque sí, a veces los espero. Sé que me voy a recomponer en algún punto, pero no hay Isa sin ustedes.
No quería escribirles porque tenía miedo de liberar mi corazón y que dijera algo incorrecto, pero necesitaba expresar lo que siento. Lo pospuse porque por mucho tiempo traté de ocultarlo hasta de mi misma, pero pasó y pasó el tiempo, de lo único que me di cuenta era que mientras más lo intentara olvidar sin antes intentar darle un final, iba a estar en completa guerra conmigo y en una dictadura que iba a perdurar por toda la eternidad.
Lo que antes era cotidiano, ahora está escrito con un "nunca más" adelante.
Recomendados
Hacete socio de quaderno
Apoyá este proyecto independiente y accedé a beneficios exclusivos.
Empieza a escribir hoy en quaderno
Valoramos la calidad, la autenticidad y la diversidad de voces.


Comentarios
No hay comentarios todavía, sé el primero!
Debes iniciar sesión para comentar
Iniciar sesión